WWF Chile presentó ante la Comisión de Pesca y Acuicultura de la Cámara de Diputados recomendaciones para la nueva Ley de Pesca, destacando la importancia de la sustentabilidad, mitigación del cambio climático, protección de la biodiversidad marina, y trazabilidad digital para combatir la pesca ilegal.
Representantes de WWF Chile presentaron ante la Comisión de Pesca y Acuicultura de la Cámara de Diputados la visión y las recomendaciones de esta organización de conservación respecto a la nueva Ley de Pesca, que se tramita actualmente en el Congreso.
Mariann Breu, coordinadora senior de Huella Ecológica y Mercados, junto a Alejandra Silva, encargada de Incidencia de la ONG, dieron a conocer el trabajo de WWF Chile en el ámbito de sustentabilidad pesquera, que se remonta a cerca de 2011, así como al rol que jugó en la incorporación de aspectos ambientales y basados en ciencia en la actual Ley de Pesca.
Más en extenso, las especialistas abordaron los aspectos que la organización considera claves para lograr que las pesquerías en Chile sean sustentables. Si bien la actual propuesta legislativa en ocasiones contempla algunos de estos temas, se estima que deben ser aún más concretos o incorporados más ambiciosamente. Entre ellos se cuenta la inclusión del enfoque precautorio dentro del objetivo de la ley y en la definición de la Política Nacional Pesquera, abarcando todo el ejercicio de la administración de pesca. Junto a ello, también destacaron la necesidad de incorporar acciones hacia la mitigación y adaptación al cambio climático considerando las características específicas de cada zona; la protección de la biodiversidad marina, incluyendo facilidades para el diseño, implementación y monitoreo de Áreas Marinas Protegidas (AMPs) y Otras Medidas Efectivas de Conservación (OMECs), y también medidas para la restauración de los ecosistemas, atendiendo en forma especial al gran impacto que se ha documentado de la contaminación por plásticos.
Asimismo, plantearon la necesidad de mayor ambición respecto a la implementación de una trazabilidad digital en todas las etapas de la cadena de suministro, con miras a eliminar la pesca ilegal, además de incorporar el enfoque de género y la justicia ambiental en la nueva ley, una herramienta para proteger los derechos de acceso a la información y participación en la toma de decisiones en materias ambientales, como lo establece el Acuerdo de Escazú.
“La crisis de los recursos pesqueros es un reflejo de la actual triple crisis ambiental, con el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación que también golpean los ecosistemas marinos y la salud de las pesquerías. Por lo tanto, esperamos que esta nueva Ley de Pesca considere esta compleja realidad y se haga cargo de ella, aportando así a la sustentabilidad y viabilidad de la actividad pesquera en el largo plazo, lo que va de la mano con la salud del océano y sus especies y el bienestar de las comunidades”, señaló Mariann Breu.
Según agregó la profesional, la nueva Ley de Pesca es una oportunidad para incorporar nuevos aspectos asociados a la triple crisis ambiental, y destalló que el actual proyecto ya muestra avances en la línea de lo planteado por WWF Chile, tales como el enfoque de género, la equidad y el reconocimiento legal a diversos niveles de organizaciones de la pesca artesanal, punto en el que también se recomienda considerar a los pueblos indígenas.