La iniciativa fue ejecutada por investigadores y profesionales de la Universidad de Atacama (UDA) y financiada con recursos del Fondo de Innovación para la Competitividad, FIC, del Gobierno Regional de...
La iniciativa fue ejecutada por investigadores y profesionales de la Universidad de Atacama (UDA) y financiada con recursos del Fondo de Innovación para la Competitividad, FIC, del Gobierno Regional de Atacama y su Consejo Regional. (Mundo Acuícola).
Con una detallada presentación de los resultados obtenidos, se realizó recientemente el cierre del Proyecto FIC Corvina Atacama denominado “Desarrollo Tecnológico del Cultivo, a Pequeña Escala, para Corvina (Cilus gilberti) en la región de Atacama”, iniciativa que, a juicio de los expertos, logró un destacado avance tecnológico para el rubro acuícola y pesquero de Atacama, y para la diversificación económica regional.
“El CIC-UDA es el único cultivo de corvina en Atacama, por lo tanto, es muy importante avanzar en esta línea porque si queremos hacer una producción sustentable, el CIC-UDA tiene que proveer de los alevines o crías a todos sus asociados, entre ellos, pescadores artesanales que tienen la posibilidad cierta de cultivar especies endémicas en sus áreas de manejo, como también a los acuicultores de pequeña escala y por qué no privados, que han estado en conversaciones para desarrollar un cultivo experimental o piloto”, explicó el director del Centro de Investigaciones Costeras de la Universidad de Atacama (CIC-UDA), Rafael Crisóstomo Gamboa.
En la oportunidad, autoridades regionales, académicas y gremiales recorrieron las dependencias del Centro de Investigaciones Costeras, CIC, de la Universidad de Atacama, específicamente donde se emplaza la unidad productiva de pre-engorda y engorda de Corvina (Cilus gilberti). Cabe destacar que el proyecto permitió la instalación de cinco estanques para un sistema de producción de alta densidad de cultivo, con un volumen total disponible para una capacidad máxima de producción de 920 kilogramos por batch o lote de producción.
Unidad de cultivo
Entre los objetivos del Proyecto -que contó con una inversión de más de $160 millones de pesos gracias a los aportes del Gobierno Regional de Atacama, su Consejo Regional y de la Universidad de Atacama-, se instaló una unidad productiva de pre-engorda y engorda, se desarrolló tecnología de cultivo para la producción a pequeña escala, se establecieron parámetros productivos, se capacitó a pescadores artesanales y pequeños acuicultores en cultivo de peces marinos y se creó un modelo de negocio local y regional con el producto final.
Para el encargado del desarrollo y tecnología del cultivo del proyecto FIC Corvina Atacama, Jorge Méndez González, “lo más destacado es que logramos determinar que el cultivo de la Corvina es factible. Determinamos las curvas de crecimiento de la especie, los factores de conversión óptimos, los rangos de temperatura óptimos, las concentraciones de oxígeno y de PH que debe tener el sistema para que los animales estén en condiciones óptimas de cultivo, es decir, hay diferentes parámetros físico químicos que tiene que tener el cultivo de peces para que se maneje en condiciones óptimas”, indicó Méndez.
Desarrollo tecnológico y diversificación
En los últimos cinco años, la UDA ha logrado destacados avances y aportes al rubro acuícola y pesquero de Atacama, cubriendo una necesidad que antes era resuelta por instituciones de otras regiones y permitiendo que los avances en I+D+i permanezcan en la Región.
“Es un proyecto exitoso. Este tipo de especies generan un nuevo mercado en la Región, se abre una expectativa tremenda para los pequeños productores de la comuna de Caldera”, señaló el director del Proyecto, Dr. Osvaldo Pavez Miqueles.
El investigador, con años de trayectoria, fue enfático en el aporte de la UDA al desarrollo regional. “La Universidad de Atacama tomó un desafío tremendo al adquirir el hatchery (centro de cultivo) y, desde esa lógica, está aportando en un área que estaba cubierta por entidades externas a la Región”, indicó Pavéz.
Finalmente, para el vicepresidente de la Asociación Gremial de Acuicultores y Profesionales de la Acuicultura de Atacama A.G.(Acuprat), Julio Marín Mellado, este proyecto además del impacto en el desarrollo productivo, tiene un efecto positivo en el medio ambiente.
“Hoy por hoy, cada día hay menos peces en el agua. Somos nosotros, los pequeños acuicultores y sindicatos de pescadores, los llamados a mantener las especies en el agua y esto (proyecto) forma parte importante de ese objetivo, por lo tanto, es muy importante cultivar peces para poder abastecer de proteínas al mundo”, concluyó el dirigente.