“Nueva normativa se enmarca en la revisión continua de las exigencias regulatorias a las que se debe someter la industria para mantener altos estándares de seguridad y resguardo medioambiental, y...
“Nueva normativa se enmarca en la revisión continua de las exigencias regulatorias a las que se debe someter la industria para mantener altos estándares de seguridad y resguardo medioambiental, y evitar episodios, como un hundimiento de jaulas y escape de peces ocurrido hace unas semanas”, advirtió Subsecretario Román Zelaya.
Un nuevo reglamento de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca) impone mayores exigencias a las estructuras de cultivo de salmones, para disminuir el riesgo de hundimiento de jaulas o escape de peces, como ocurrió hace unas semanas en un centro de la empresa Blumar, en la Región de Los Lagos.
La norma -que será publicada próximamente- considera una metodología relacionada con la medición de los distintos elementos (corrientes, vientos y olas, entre otros) que puedan impactar sobre las jaulas de cultivo.
La misma metodología determina fórmulas de cálculo y coeficientes de seguridad que deben aplicarse en la determinación de la cantidad y dimensiones de los fondeos (anclajes de las estructuras), así como requisitos para garantizar la vida útil de las jaulas y las redes de cultivo.
La norma fue elaborada bajo la premisa de que esas estructuras deben ser capaces de contener a los peces y evitar su escape, a la luz de distintos episodios que han involucrado a jaulas de ese tipo, a lo largo del tiempo.
La nueva regulación de Subpesca se basa en datos reunidos en un estudio del Fondo de Investigación Pesquera (FIPA), cuya ejecución se encargó a la Pontificia Universidad Católica de Valparaiso.
El Subsecretario de Pesca y Acuicultura, Román Zelaya, informó que la nueva normativa «se enmarca en la revisión continua de las exigencias regulatorias a las que se debe someter la industria para mantener altos estándares de seguridad y resguardo medioambiental, y evitar episodios, como el hundimiento de jaulas y escape de peces ocurrido hace unas semanas en Reloncaví».
Finalmente, Zelaya destacó el trabajo y los procedimientos de fiscalización y sancionatorios que están llevando adelante Sernapesca y la Superintendencia de Medio Ambiente, ante cualquier daño ambiental que haya podido registrarse como consecuencia del hundimiento de las jaulas en el centro de Blumar.