Nuevas exigencias que permitieron una mejor visualización del fondo marino y evaluaciones oportunas de las condiciones ambientales, además de la mantención de los porcentajes históricos de la proporción de INFAs...
Nuevas exigencias que permitieron una mejor visualización del fondo marino y evaluaciones oportunas de las condiciones ambientales, además de la mantención de los porcentajes históricos de la proporción de INFAs aeróbicas y anaeróbicas por región, son parte de las principales conclusiones que arroja el Boletín Ambiental publicado hoy por el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, Sernapesca.
En el documento, la entidad destacó la eficacia de las modificaciones al Reglamento Ambiental de la Acuicultura implementadas a principios del 2019, lo que permitió entre otros aspectos mejorar la metodología y los equipos utilizados para la filmación del fondo marino, lo que ha redundado en una detección más precisa y oportuna de posibles alteraciones en el sustrato.
El documento, denominado «Boletín Ambiental: Evaluación de los informes ambientales de los centros de cultivo en las regiones de Los Lagos, Aysén y Magallanes»; explica que los centros de cultivo tienen la obligación de operar en condiciones compatibles con las capacidades de los cuerpos de agua.
Para asegurar lo anterior, se debe realizar periódicamente el análisis de las condiciones ambientales de la zona de influencia de cada centro, en fechas establecidas o en función del ciclo de producción de cada especie cultivada, generando informes denominados, «Información Ambiental» (INFA), los cuales permiten conocer el estado del área de sedimentación o la columna de agua de cada centro. «En el caso que se determine la condición ambiental anaeróbica, se prohíbe el ingreso de nuevos ejemplares hasta que, mediante la elaboración de otra INFA, se acredite que se ha retornado a la condición aeróbica», explica el reporte.
El boletín indica que el año pasado se realizó un total de 471 informes ambientales, de los cuales 127 resultaron anaeróbicos. El porcentaje es similar a lo obtenido en los años anteriores (2012-2019), con un promedio general del 76% de INFAs aeróbicas y un 24% en condición de anaerobiosis. El informe señala que en el ejercicio 2020, en tanto, entre enero y mayo se realizaron 132 INFAs, con un 65% de los centros en condición aeróbica.
Cruce de información
Por otra parte, Sernapesca destaca también la nueva estrategia de fiscalización basada en el cruce de información proveniente de distintas fuentes, y que combina tanto la fiscalización presencial y remota de las instalaciones de las entidades de análisis (laboratorios), con el seguimiento de muestreos, la información de posicionamiento satelital, entre otros, lo que ha permitido detectar irregularidades e incumplimientos, que han sido sancionados.
A modo de ejemplo, el reporte señala que uno de los laboratorios que se adjudicó la licitación pública para elaborar las INFAs en las regiones de Los Lagos, Magallanes y parte de Aysén, «fue sancionada con la eliminación del registro del Decreto Supremo N°15 del 2011, debido a que se detectó que la entidad facilitó la alteración del fondo marino en un centro de cultivo y entregó información falsa en los instrumentos de evaluación ambiental».
«Lo anterior implicó que la entidad no pudiera seguir elaborando INFAs y se contratara a otras entidades acreditadas en inscritas en el registro, las cuales están siendo fiscalizadas estrictamente en el marco del programa especial que estableció Sernapesca para el 2020».
Descargue aquí el Boletín Ambiental: Evaluación de los informes ambientales de los centros de cultivo en las regiones de Los Lagos, Aysén y Magallanes.
