La industria está tomando medidas precautorias y de contingencia, debido a que en la temporada estival se dan las condiciones favorables para el surgimiento de estos fenómenos.
Ante la proximidad de la estación donde proliferan los eventos de floraciones algales nocivas, más conocidos como FANs o “Marea Roja”, y que pueden generar consecuencias negativas en la población con impactos que van desde intoxicaciones en seres humanos hasta mortalidades masivas de peces, las empresas salmonicultoras chilenas han reforzado una serie de resguardos en la macrozona sur para monitorear y mitigar este fenómeno.
“En los últimos veranos, se han intensificado las floraciones de microalgas, debido en gran parte a que el cambio climático disminuye los días de lluvia y permite que se acumule radiación solar. Es por eso que la salmonicultura chilena está avanzando proactivamente con el objetivo de evitar pérdidas de peces por mortalidades masivas y efectos indeseados en el medio ambiente. Como gremio queremos contribuir a generar más información también, por ello hemos desarrollado recientemente un boletín que estaremos publicando de manera periódica”, sostiene Loreto Seguel directora ejecutiva del Consejo del Salmón.
En la práctica, las empresas socias del Consejo del Salmón AG, a través de diversas iniciativas caracterizadas por un enfoque preventivo, están actualmente fortaleciendo procesos en los centros de cultivo. En paralelo, el gremio ha publicado ya dos boletines mensuales denominados «FANews», material elaborado con el apoyo de la consultora CERES BCA y que busca contribuir a mejorar el acceso de la comunidad a la información sobre estos eventos que en los últimos años se han vuelto más frecuentes, en parte, a causa del cambio climático. Estos reportes abordan qué son las FANs y el comportamiento del fenómeno durante los últimos meses en Chile y el mundo. El primer boletín presentó una breve historia de las FAN y el segundo aborda qué papel juega el cambio climático en la generación de estos eventos. Para leer «FANews» descargarlo haciendo click aquí
En el ámbito de la operación, una de las acciones clave que se están adoptando por parte de las empresas tiene que ver con el monitoreo. Esto se traduce en mantener una vigilancia constante en los centros de cultivo de salmón para detectar la presencia de algunas de estas especies nocivas, ya que las microalgas son la base de la cadena trófica en los océanos y son organismos que siempre han estado presentes en los ambientes acuáticos. De hecho, la salmonicultura desde sus orígenes ha convivido con ellas, y aunque menos del 10% de todas las especies de microalgas presentes en el mar pueden llegar a ser nocivas para los peces, es importante mantener una vigilancia constante y planes de contingencia ante posibles situaciones, así, se pueden tomar acciones a tiempo para mantener el bienestar de los peces e intentar reducir las mortalidades masivas que, además de causar pérdidas económicas muy importantes, podrían generar impacto ambiental y constituir un peligro sanitario cuando las acciones tomadas para extraer los peces muertos no son las adecuadas.
También las empresas han reforzado la creación de áreas de trabajo dedicadas a la vigilancia ambiental, la instalación de laboratorios de monitoreo in situ, y la incorporación de tecnología de punta -como por ejemplo las cortinas de burbujas en el agua-para mitigar el efecto de las FANs, y de sistemas centralizados de manejo de información, donde diferentes centros de cultivo reportan información de las microalgas presentes en el agua para enfrentar mejor las floraciones a través del trabajo colaborativo. Estas acciones son fundamentales para la eficacia de los sistemas de mitigación, y deben activarse antes de que el centro presente concentraciones críticas de una microalga nociva, debiendo mantenerse en funcionamiento durante 24 horas, o hasta que las concentraciones del área afectada dejen de ser un riesgo para los peces.
Desde el gremio agregan que se avanzará en reforzar también la coordinación con las autoridades regionales de la macrozona sur y sectoriales para abordar estos eventos que en esta temporada se presentan con mayor fuerza afectando a varias actividades productivas en distintas zonas del país y el mundo, algunas con presencia de cultivos en mar y otras donde no se desarrolla la acuicultura.