No obstante, el precio promedio semestral de venta de su salmón Atlántico bajó 12% contra el año anterior, y los ingresos aumentaron 77% hasta los US$ 155,7 millones, gracias a...
No obstante, el precio promedio semestral de venta de su salmón Atlántico bajó 12% contra el año anterior, y los ingresos aumentaron 77% hasta los US$ 155,7 millones, gracias a un aumento de los volúmenes vendidos. (Mundo Acuícola).
Salmones Camanchaca S.A. publicó sus estados financieros e informó que en el primer semestre del año registró un Ebitda antes de Fair Value (ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y
amortización) de US$ 34,7 millones, 30,7% superior a los US$ 26,5 millones del mismo período de 2017. La utilidad, por su parte, fue 221,8% superior y alcanzó los US$ 18,8 millones.
Comparando segundo trimestre contra mismo trimestre del año anterior, Salmones Camanchaca obtuvo un Ebitda de US$ 16,2 millones (+108,2% mejor) y una utilidad de US$ 3,1 millones.
Pese a que el precio promedio del salmón Atlántico vendido bajó 11,3% con respecto al segundo trimestre de 2017, cuando los precios alcanzaron su máximo anual.
Los ingresos del primer semestre de la compañía subieron 76,6% hasta los US$ 155,7 millones. Lo anterior se debió a un aumento de 111% de los volúmenes vendidos de salmón atlántico propio, en línea con el crecimiento de 104% en las cosechas, las que llegaron a 20.721 toneladas WFE (Pescado entero).
Ricardo García Holtz, vicepresidente de Salmones Camanchaca, señaló que “el crecimiento en nuestras cosechas de salmón atlántico y los mejores factores de conversión, compensaron el efecto de no alimentación aplicado durante el primer trimestre de 2018 por blooms estacionales, y nos permiten reafirmar para este año nuestras estimaciones originales de cosecha de 48 mil toneladas WFE”.
Los costos de cultivo del semestre fueron de US$ 3,1 por kilo de pez vivo, en línea con los objetivos de la empresa de costos anuales cercanos a US$ 3 por kilo. A su vez, los costos de procesos primarios y secundarios alcanzaron durante la primera mitad del año, US$ 0,98 por kilo WFE, 22% inferiores a los del mismo período del año anterior.
Al respecto García Holtz indicó que “estas disminuciones de costos son el resultado de nuestra mayor escala y de los proyectos de eficiencia implementados desde 2017 en nuestras plantas, y que fueran presentadas durante el proceso de apertura a la Bolsa de la Compañía”.