El artículo reconoce el aporte del conocimiento local y tradicional de las culturas en la co-producción de conocimiento científico para adaptarse a los efectos del cambio climático.
Se trata del artículo titulado “Múltiples sistemas de conocimiento y acciones participativas en los efectos de inicio lento del cambio climático: recomendaciones y perspectivas en américa latina y el caribe” en el cual los investigadores buscan avanzar en la literatura sobre múltiples sistemas de conocimiento – científico, tradicional y local – que pueden apoyar e incentivar la co-producción del conocimiento sobre los efectos de inicio lento del cambio climático en América Latina y Caribe.
La prestigiosa revista internacional Current Opinion in Environmental Sustainability publicó recientemente un artículo en el que participan 4 investigadores de la Universidad de Los Lagos junto a académicos de México, Chile, Brasil y Canadá.
El Dr. Allan Iwama, investigador de postdoctorado de la Universidad de Los Lagos es el líder del proyecto CoAdapta | Litoral, quien trabajó en colaboración con los investigadores Francisco Araos – Investigador del CEDER y del Laboratorio de Ciencia Ciudadana, Jeremy Anbleyth-Evans – investigador de postdoctorado del CEDER y del Laboratorio de Ciencia Ciudadana, y Francisco Ther-Ríos – Académico del Departamento de Arquitectura, todos de la Universidad de Los Lagos.
“Este enfoque implica reconocer la heterogeneidad cultural del conocimiento tradicional (por ejemplo, el conocimiento indígena y de los pueblos originarios) y el conocimiento local, y cómo esto puede vincularse con acciones prácticas para adaptarse a los efectos climáticos y al cambio global. La integración del conocimiento tradicional y local con el conocimiento científico en la evaluación de impacto y riesgo, puede ser necesaria para desarrollar una planificación tanto a corto como a largo plazo. Los autores revisan cómo y por qué el sistema de conocimiento tradicional y local debe integrarse en la adaptación al cambio climático en América Latina y el Caribe, y ofrecen una perspectiva crítica y una visión hacia la incorporación de este sistema de conocimiento sobre los riesgos climáticos y la adaptación en A. Latina y el Caribe”, explica el investigador del Ceder ULagos, Francisco Araos.
Según se señaló, este trabajo es el resultado del proyecto CoAdapta | Litoral [Proyecto postdoctorado ANID/FONDECYT 3180705] – https://www.coadaptalitoral.net/ – coordinado por el Dr. Allan Iwama, quien desarrolla su investigación junto a las comunidades de pescadores artesanales de Dalcahue, la comunidad indígena Mon Fen de Yaldad de la comuna de Quellón, y los pescadores artesanales de Maullín. Además, hay un trabajo en Brasil, en el litoral norte de Sao Paulo y el litoral sur de Rio de Janeiro, con comunidades de caiçaras (pescadores) y quilombolas.
Efectos de inicio lento de adaptación al cambio climático
“Cuando referimos a efectos de inicio lento al cambio climático, nos enfocamos en comprender el aporte del conocimiento tradicional y local sobre las amenazas asociadas con el aumento de la temperatura global, la pérdida de la biodiversidad terrestre y marina, la degradación de la tierra y de los bosques, la elevación del nivel del mar, la desertificación, la salinización del suelo, la reducción de glaciares y la acidificación de los océanos. Procesos que, a diferencia de los eventos climáticos extremos como las inundaciones, marejadas, sequías severas, olas de calor, ciclones tropicales, demoran mucho más tiempo en explicitar sus efectos y, por lo tanto, son más difíciles de identificar y enfrentar”, explica el Dr. Iwama.
La investigación liderada por el dr. Iwama se inició en el año 2018 y muestra que la integración del conocimiento tradicional y local con el conocimiento científico es fundamental y necesaria para co-producción de observaciones sobre los cambios climáticos. De acuerdo a lo que indica el investigador, las iniciativas que colocan entre sus objetivos esta integración de múltiples conocimientos, permiten reconocer las experiencias locales y cotidianas de los efectos del cambio climático percibidas por las personas en sus territorios, además de concientizar a la población directamente afectada acerca de la posibilidad de enfrentamiento de sus efectos. Asimismo, permite desarrollar una planificación territorial, a corto y largo plazo, que sea pertinente y capaz de enfrentar procesos de transformación ambiental de gran envergadura.