El primer lugar fue otorgado a «Harinas de mejillón de alto valor nutricional» de Dryer Chile, que busca aprovechar los residuos de la industria mitilicultora para generar harinas nutritivas, promoviendo la economía circular.
El martes 27 de febrero, se llevó a cabo la premiación y clausura de la segunda edición del «Premio ACME Chile para el Cambio Climático». Una iniciativa que busca identificar, apoyar con financiamiento y visibilizar soluciones innovadoras y sustentables que contribuyan a la reducción de la huella de carbono en la industria de productos del mar.
En esta segunda edición, se recibió un total de 22 propuestas, las cuales fueron sometidas a un riguroso proceso de evaluación donde se evaluaron tres aspectos clave: innovación, implementación e impacto. La innovación se midió por la introducción de elementos novedosos en las industrias marinas. La implementación consideró la viabilidad y escalabilidad de la solución, incluyendo el uso de recursos, plazos y replicabilidad. Por último, el impacto se centró en la reducción de la huella de carbono prevista y las metodologías de medición utilizadas.
El ganador del primer lugar, «Harinas de mejillón de alto valor nutricional» de Dryer Chile, busca solucionar el problema de generación de residuos que existe en la industria mitilicultora, en específico la carne de mejillón que se descarta, sin comercializarse, y termina en los vertederos, significando un costo (económico) para la industria y para el medioambiente. Se busca, por tanto, dar valor a este residuo orgánico a través de la generación de harinas de alto valor nutritivo, aplicando la economía circular.
Mientras que el segundo lugar, “Baukatech boyas fúngicas” de la startup Biokeikruk, tiene como objetivo abordar la grave problemática de la contaminación por plásticos en los océanos, incorporando el reino fungi a la industria de productos del mar a través del diseño e instalación de boyas biodegradables en los centros de cultivo y otras instalaciones.
«Estamos convencidos de que los dos proyectos seleccionados tendrán un impacto significativo en la reducción de la huella de carbono en las industrias de productos del mar. Asimismo, contribuirán de manera importante a la lucha contra los efectos del cambio climático. Este hito es solo el comienzo de nuestro compromiso continuo con la sostenibilidad y la innovación», señaló en la ceremonia Franco Adam, gerente general de ACME Chile.
Por su parte, Rodrigo Rubilar, gerente de operaciones de Dryer Chile, afirmó: «Estamos agradecidos por ser reconocidos con el ´Premio ACME Chile para el Cambio Climático´. Iniciativas como este premio son un ejemplo para otras compañías para apoyar a empresas que están buscando innovar con foco en la agregación de valor en distintos sectores productivos, en especial en temas tan importantes como la sustentabilidad, el cambio climático y la economía circular”.
Lorenza Zanoni, CEO de Biokeikruk, indicó en la premiación que: «Buscamos desplazar las boyas tradicionales que generan bastante contaminación en el medio ambiente. Los microplásticos de estas boyas contaminan los alimentos, mientras que las nuestras, al ser 100% orgánicas, no contaminan ni generan problemas en la cadena alimentaria”.
Respecto al evento, este contó con la presencia del equipo organizador de ACME Chile y los representantes de los proyectos premiados. Por un lado, Rodrigo Rubilar, gerente de operaciones de Dryer, y Boris Sepúlveda, director de I+D de la misma empresa. Además, estuvo presente Lorenza Zanoni, CEO de Biokeikruk, quien asistió en compañía de Gustavo Torres, coordinador de Reciclaje y Manejo Ambiental.
La ceremonia abarcó la entrega de los premios, seguida de un panel de conversación moderado por Franco Adam. Durante este espacio, se profundizó en las iniciativas premiadas y se exploraron posibles vías de colaboración y desarrollo futuro, destacando el compromiso conjunto hacia la innovación y la sostenibilidad en la industria.