Por medio de estas iniciativas, además de mejorar las redes para capturar la especie deseada, se busca avanzar en el cambio de las normativas que hay en este momento respecto...
Por medio de estas iniciativas, además de mejorar las redes para capturar la especie deseada, se busca avanzar en el cambio de las normativas que hay en este momento respecto al descarte (Mundo Acuícola-PUCV).
En un taller realizado en Valparaíso se presentaron los resultados de los proyectos “Selectividad en redes de arrastre en uso en la pesquería de merluza común: su efecto en la explotación, en la fauna acompañante y en la captura incidental” (FIPA N° 2017-47), y “Estudio de selectividad de las artes utilizadas por las flotas industriales que operan sobre merluza de cola” (FIPA N° 2017-51).
Ejecutados por el laboratorio de Tecnología Pesquera (TecPes) de la Escuela de Ciencias del Mar de la PUCV, ambos proyectos buscaban caracterizar, evaluar y mejorar la selectividad de los artes de pesca utilizados en la flota arrastrera nacional de merluza común de cola.
Entre los participantes al taller se encontraban representantes del Instituto de Fomento Pesquero (IFOP), Instituto de Investigación Pesquera (INPESCA), de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca), de las flotas arrastreras de las regiones de Valparaíso y Bio Bío, de ONG’s e investigadores del área.
Uno de los temas abordados fue el de la fauna acompañante la que, según informó Arnaldo Zuñiga, profesional del INPESCA, ha ido a la baja gracias al uso de distintas mejoras en los artes de pesca. “Hace 15 años la fauna reportada estaba representada por un mayor número y volumen de especies, mientras que ahora ha sido posible reducir tanto la cantidad de especies como su aporte relativo a la captura total”.
Con estos proyectos, además de mejorar las redes para capturar la especie deseada, se busca avanzar en el cambio de las normativas que hay en este momento respecto al descarte. “En un futuro esperamos que los pescadores puedan llevar todo a puerto, algo que no pueden hacer ahora ya que hay regulaciones que lo restringen y eso es una contradicción. La idea es que procesen todo sin que sean multados”.
Claudio Bernal del Instituto de Fomento Pesquero (IFOP), también se refirió al tema, e indicó que la modificación de las artes ayuda a reducir el descarte ya que mejoran la selectividad. “Hay procedimientos que tienen que ver con la selectividad del arte, su estructura y también con las maniobras a bordo, cuyas mejoras van a permitir pescar lo que se quiere, dejando de lado a otras especies tales como mamíferos y aves, así como a la fauna acompañante”.
FIPA N° 2017-47
Para el desarrollo del proyecto “Selectividad en redes de arrastre en uso en la pesquería de merluza común: su efecto en la explotación, en la fauna acompañante y en la captura incidental”, se realizó una revisión de los principales trabajos de selectividad de artes de arrastre desarrollados a nivel mundial sobre especies de las familias Merlucciidae y Gadidae, donde se encuentran especies tan relevantes como las merluzas.
El Dr. Dante Queirolo, jefe de TecPes, explicó que existe un claro patrón que relaciona el tamaño de la malla utilizada con el de los peces que son retenidos por las redes. “Realizamos dos aproximaciones para estimar la selectividad de las redes de arrastre de fondo usadas en Chile; una teórica a partir de la morfología de los peces y otra empírica mediante experimentos en terreno usando el método de copo cubierto. Pudimos establecer que la mayor probabilidad de retención de merluza común está asociada a peces de longitud total igual o mayor a 30 cm”.
La selectividad de la flota industrial estimada presenta mayor vulnerabilidad de los individuos de clases 2, 3 y 4 años, respecto del patrón de explotación de la pesquería. Ahora bien, eventuales cambios en el patrón de explotación a través de la talla de captura no son suficientes para la recuperación poblacional si el patrón de explotación de la flota artesanal no cambia.
“La explotación de los artesanales sobre el total de la pesquería es importante y está determinado por la contribución porcentual de esta flota en las capturas totales. De hecho, las perspectivas reales de la recuperación poblacional resultan aún más difíciles de lograr en caso de existir sub-reporte, por cuanto la sobrevivencia de los individuos que aportarán al stock desovante sería mucho menor. Se estima que la recuperación poblacional podría ser efectiva ya sea incrementando la talla de selectividad de ambas flotas por sobre los 45 cm, o bien, reduciendo el esfuerzo de pesca a menos en la mitad”.
Durante el proyecto también se evaluó la selectividad de especies de un nuevo diseño de red de arrastre, que consiste en el uso de mallas de gran tamaño en la sección frontal (cabezal) para facilitar el escape de fauna acompañante y la captura incidental de mamíferos marinos.
Marcelo Iturra patrón del Skorpion (flota arrastrera de San Antonio), comentó que durante años estaban buscando una solución para reducir la mortandad de lobos marinos producida por la pesca incidental, “la universidad incluyó un excluidor a la red y nos entregó la pauta para utilizarlo. Nos dimos cuenta que éste era la solución para eliminar completamente el problema que teníamos con los lobos, que en la flota de San Antonio era bastante alta y oculta, y que nos generaba una merma económica”.
Agregó además, “las modificaciones a las redes nos van a ayudar a tener una mejor calidad ya que vamos a conservar la especie. Hemos podido constatar que la merluza común ha aumentado su tamaño. Antes, cuando íbamos a pescar, las lanchas llegaban con 4 o 5 cajas maltonas, ahora están llegando con bastante más”.
FIPA N° 2017-51
En relación al proyecto “Estudio de selectividad de las artes utilizadas por las flotas industriales que operan sobre merluza de cola”, Queirolo indicó que en esta pesquería se utilizan redes de arrastre de mediagua, y para estudiar su selectividad se realizaron aproximaciones mediante los métodos de copo cubierto y copo pantalón, a partir de lo cual fue posible estimar la probabilidad de retención por tamaños en este recurso.
Se realizó un experimento de selectividad teórica a partir de la morfología de los peces y el tamaño y configuración de las mallas usadas en los copos. “A partir de los resultados estimamos que el uso de tamaño de luz de malla de 120 mm se relaciona con un tamaño de primera captura de 52 cm de longitud total, mientras que mallas de 130 mm permitirían un tamaño de primera captura de 57 cm de longitud total de merluza de cola”.
A través de filmaciones submarinas quedó demostrado que la merluza de cola presenta una natación activa al interior de los copos, evidenciando que posee resto suficiente para intentar un escape activo durante el proceso de captura. “Este comportamiento es favorable para avanzar hacia el diseño e instalación de sistemas de selección basados en escape activo para peces de menor tamaño. Es necesario evaluar el uso de una sección de escape de malla cuadrada, de 100 mm de luz de malla, de material trenzado sin nudo, que se ubique entre el antecopo y el copo de las redes”.
La evolución del arte de pesca ha permitido disminuir el descarte de la especie objetivo y aumentando la selectividad en el tiempo, así lo manifestó Alex Cid de PacificBlu (San Vicente- Talcahuano), quien lleva trabajando más de 29 años en barcos arrastreros. “Hoy utilizamos artes que nos han ayudado a mejorar la selectividad del recurso objetivo, permitiendo el mayor escape de juveniles y especies que no son objetivo de captura”.
Considera que este tipo de proyectos son importantes para que la comunidad científica pueda basarse en parámetros reales, y así implementar nuevas medidas que permitan buscar mejoras para reducir la pesca incidental y mejorar la captura retenida.