Zonas de mayor producción acuícola coincidirían con lugares privilegiados para la generación de energía marina en Chile.
Por definición, la energía marina corresponde a aquella que se obtiene a partir del movimiento de las olas, mareas, corrientes, salinidad o diferencias de temperatura del océano. Sin embargo, en algunos casos, también se considera dentro de este tipo a la energía eólica de alta mar.
Si bien el mes de mayo es conocido en Chile como el Mes del Mar, desde el 4 del presente la Facultad de Ingeniería y Tecnología de la Universidad San Sebastián también lo conmemora como el “Mes de la Ingeniería”, instancia en la que destaca la realización de un ciclo de webinars que abordarán diferentes temas de interés respecto al área.
Así, en el contexto se su inauguración, se realizó la charla “Energía marina y sus oportunidades para Chile”, en la cual Marcos Di Lorio, Jefe de Proyectos del Marine Energy Research and Innovation Center (MERIC), explicó el potencial que tiene Chile para el desarrollo de energías marinas y el trabajo multidisciplinar ejecutado por MERIC -junto a otras instituciones- para medir y entender dicho potencial.
“Sin lugar a dudas, con sus miles de kilómetros de extensión, la energía de las olas es uno de los recursos energéticos más importantes que tiene Chile, siendo privilegiados en el mundo, pues está dentro de los puntos de incidencia de mayor energía”, explicó Di Lorio, agregando que otro dato relevante es la constancia energética del oleaje durante el año y su presencia a lo largo de toda la costa.
Asimismo, el también ingeniero mecánico apuntó que otro aspecto energético serían las mareas, en torno a las cuales ya se empiezan consolidar algunas diseños y prototipos a nivel internacional.
“Durante este tiempo hemos diseñados dos campañas de medición, y lo que hemos visto es que las magnitudes son comparables e incluso mayores a los principales lugares donde se están desarrollando proyectos de energía de mareas, como en la Bahía de Fundy en Canadá”.
Energía eólica marina
Más allá si se considera o no energía marina, Marcos Di Lorio manifestó que nuestro país también dispone de privilegios para el desarrollo de energía eólica marina, la cual tiene ventajas como la velocidad del viento Offshore a una menor altura que en tierra.
“La particularidad en Chile el tema es el fondo, que supera los 50 metros de profundidad en lugares cercanos a la costa, por lo que es indispensable recurrir a tecnologías flotantes para explotar el viento offshore, el que tendría un potencial energético en Chile 125 Gigawats potencial energético. Dentro de los limites se ha cotado una zona que es propicia para un primer campo eólico flotante, que es 16 gigwats, que cuentan con las velocidades ideales para el desarrollo de este tipo de tecnologías, profundidades menores a los 200 metros y se encuentran en punto cercanos a líneas de transmisión y subestaciones», explicó.
Oportunidades de aplicación para la realidad nacional: Acuicultura
Dentro de la oportunidades que tiene el país para el desarrollo de este tipo de energía, además de sus condiciones naturales, Di Lorio resaltó también la cadena de suministros y la disposición puertos a lo largo del territorio, como también el hecho de que Chile se encuentra alineado con las metas de descarbonización de la Unión Europea
Por otra parte, señaló también que cuando la tendencia de cultivos Offshore sea necesaria para el crecimiento de la salmonicultura nacional, las energías marinas tomarán un rol aún más importante.
“Será una de las industrias que necesitará sacar provecho de las fuentes de energías renovables marinas para abastecer la gran necesidad de energía que tendrán a mar abierto, especialmente para la realización de sus diferentes procesos como la alimentación de peces”, proyectó.
Otro punto relevante respecto a la industria acuícola es que según Di Lorio, «las zonas de mayor producción acuícola coinciden con los lugares en Chile que disponen uno de los recursos más potentes en energía marina. Por ejemplo, Aysén y Magallanes son unos de los puntos de mayor incidencia de energía de oleaje, mientras que al sur de Chiloé el viento Offshore es privilegiado».
Finalmente, también proyecto que las energía marinas podrían ser una solución respecto al abastecimiento de agua en zonas de escases hídrica, con al implementación de desalinizadores asociadas a sistemas de generación de energía marina; y también pueden contribuir a satisfacer las necesidades energéticas de áreas remotas, disminuyendo gastos de combustible tanto en transporte como en generación.