El sindicato de pescadores Robalito de Corral fue el beneficiario del proyecto FIC (Fondo de Innovación para la Competitividad) del Gobierno Regional de Los Ríos, que desarrollará un modelo productivo...
El sindicato de pescadores Robalito de Corral fue el beneficiario del proyecto FIC (Fondo de Innovación para la Competitividad) del Gobierno Regional de Los Ríos, que desarrollará un modelo productivo y comercial de ostricultura a pequeña escala.
Sonia Hernández, la presidenta del sindicato Robalito de Corral, se define como una “mujer de mar” y “de lucha”. Ya lo demostró hace más de una década cuando cultivaron ostras por primera vez. Al no haber demanda por el producto en la zona, partió a Santiago dispuesta a encontrar un comprador. No obstante, sólo halló decepciones.
Ahora, cuando nuevamente están desarrollando el cultivo de ostra japonesa, ni ella ni los más de 50 pescadores artesanales asociados al sindicato quieren volver a vivir esa frustración. Tampoco lo quiere el Gobierno Regional de Los Ríos, que dio el vamos al Proyecto FIC (Fondo de Innovación para la Competitividad) denominado “Desarrollo de un modelo comercial para reactivar la economía de la producción de la ostra japonesa mediante la incorporación de innovación en acuicultura de pequeña escala en la Región de Los Ríos”.
El proyecto fue presentado por Fundación Chile (FCh) y será desarrollado a través de la plataforma del Centro de Innovación Acuícola AquaPacífico. Según el director de I+D moluscos, Daniel Arriagada, quien lidera esta iniciativa, “existe una problemática generalizada en los ostricultores, que es vender el producto”. Para cambiar esta realidad, el proyecto pretende “desarrollar un encadenamiento productivo y comercial mediante procesos innovadores entre los asociados de Robalito y la empresa privada, que permitan un aumento de la competitividad y venta de sus productos”.
Aunque AquaPacífico está destinado a cubrir principalmente las necesidades de la macrozona centro-norte, a través de sus socios (Fundación Chile y UCN) mantiene vínculos con los pequeños acuicultores de todo el país, que enfrentan problemáticas similares. “Concretamente la comunidad de Robalito tiene brechas importantes en cuanto a hacer más eficiente el cultivo y la comercialización de sus productos. Nos acercamos a ellos ofreciendo mejorar su modelo de negocio, tanto en incorporar tecnología y producir a menor costo, como para poner en práctica un modelo que permita valorizar su producto y abrir el abanico de clientes objetivos. Para eso, por ejemplo, hay que tener la posibilidad de cosechar durante todo el año, lo que significa tener otra estrategia de cultivo”, explica Daniel Arriagada.
En relación a esta iniciativa, Ernesto Espinoza, jefe de División de Fomento e Industria del Gobierno Regional de Los Ríos, destaca la importancia de contar con asesoría de expertos tales como los profesionales del Centro de Innovación Acuícola AquaPacífico, lo cual permitirá posicionar un recurso bentónico con gran potencial, abriendo una nueva alternativa de ingreso para los productores, considerando factores tanto productivos como comerciales, poniendo a disposición de los consumidores un nuevo y atractivo producto , originado en la región bajo condiciones sustentables.
Mujeres y hombres de mar en Robalito
Situado en la ribera sur de la isla Mancera, donde posee una concesión de acuicultura, el sindicato Robalito de Corral está integrado por mujeres y hombres de mar, equitativo en las proporciones por género y dedicados principalmente a la pesca artesanal. “Hay mujeres que son pescadoras de verdad, que van a la mar con los maridos; algunas son auxiliares de buzos; otras recolectoras y fileteadoras, además de las que se dedican al transporte marítimo junto a sus familias”, comenta Sonia Hernández, líder de la agrupación.
Hasta ahora, han desarrollado la acuicultura como una actividad paralela, motivados por la baja de las capturas de la pesca artesanal en la bahía de Corral. Además del cultivo de ostra japonesa (Crassostrea gigas) que retomaron hace un par de años, cultivan choro zapato y pelillo. Respecto a la ostra, la Sra. Sonia sostiene que “no hay hábito de consumo de este bivalvo en la zona; son restaurantes muy puntuales a los que le hemos podido vender”. De ahí su esperanza en los resultados de este proyecto para mantener lo que califica como un “mejor nivel de vida” que han logrado los pescadores artesanales de esta comunidad en los últimos años a través de distintos emprendimientos. “En este tiempo se ha entendido que, en la medida que trabajemos unidos, vamos a obtener mayores recursos para todos”.
Respecto a los beneficios que podría generar esta iniciativa, el director del proyecto para Robalito es enfático: “Tenemos que mostrarles que, a largo plazo, esto puede ser un ingreso interesante para ellos, que les va a permitir mejorar las condiciones de la comunidad costera. De este modo, su sindicato podría convertirse en una unidad demostrativa para otras agrupaciones de la región y del país, que a futuro podrían unirse y trabajar en conjunto para tener un mayor volumen de producto y llegar a otros mercados, tanto nacionales como internacionales”.
Triple impacto
Junto con reactivar la ostricultura, generando beneficios económicos y sociales para la comunidad costera de Corral, se tomarán las medidas para que la puesta en práctica del modelo sea amigable con el medio ambiente. “Estamos hablando de un esquema de triple impacto positivo: social, económico y ambiental”, destaca Fernando Jiménez de Cea, director ejecutivo de AquaPacífico.
El directivo cuenta que hubo una solicitud especial del Gobierno Regional de Los Ríos de no sobrecargar el sistema de cultivo. “Atenderemos a esa demanda, que es fundamental para evitar enfermedades en el cultivo y obtener ostras sanas y libres de contaminación. Además, se utilizarán semillas de Cultimar, proveedor certificado sanitariamente a nivel internacional, que exporta a los mercados más exigentes del mundo”, asegura, recalcando que el objetivo es lograr “un cultivo eficiente y sustentable en lo económico y ambiental, que sea un ejemplo para otras comunidades que lo quieran implementar”.