
La coalición anunció que, de imponerse en los comicios del 3 de mayo, bloqueará las importaciones desde Chile por razones de bioseguridad.
El salmón chileno debutó en el mercado australiano hace apenas cinco meses y ya enfrenta una posible prohibición. Según publicó Pulso de La Tercera, la oposición australiana, encabezada por el líder del Partido Liberal, Peter Dutton, anunció en la región de Tasmania que, si triunfa en las elecciones federales anticipadas del próximo 3 de mayo, detendrá el ingreso de salmón chileno, argumentando que representa un riesgo para la bioseguridad y para la industria salmonera local.
“El gobierno de coalición liderado por Peter Dutton protegerá la vital industria salmonera de Tasmania, prohibiendo las importaciones de productos de salmón chileno”, declaró el senador liberal por Tasmania, Jonathon Duniam. El parlamentario —quien también ha sido subsecretario de Medio Ambiente, Pesca y Silvicultura— calificó la autorización del gobierno actual como “una bofetada para los trabajadores del salmón de Tasmania y para la industria local”.
Duniam también afirmó que, de asumir el poder, “revisaremos de inmediato los requisitos de importación de salmón chileno a Australia. Esta revisión responderá a las preocupaciones sobre los posibles riesgos para la seguridad alimentaria de los consumidores australianos”.
Crecimiento de la salmonicultura australiana
En la página oficial de campaña del Partido Liberal, el comando de Dutton ha reforzado esta postura comprometiéndose a entregar certezas regulatorias a los productores locales, en un contexto donde la salmonicultura australiana ha crecido aceleradamente. Hoy, Australia es el séptimo exportador mundial, con ventas cercanas a los US$ 1.000 millones, aunque aún lejos de Chile, que en 2024 registró envíos por US$ 6.500 millones.
La industria salmonera se ha transformado en la principal actividad productiva de Tasmania, con más de 5.000 trabajadores. Aun así, enfrenta críticas similares a las que recibe el sector chileno, especialmente respecto a sostenibilidad y crecimiento intensivo. “Estos productos representan una amenaza muy real para nuestra industria salmonera y el medioambiente en general, con el riesgo de introducir nuevas enfermedades del salmón en el estado”, sostuvo Duniam. “Todos vimos lo que ocurrió este verano cuando una nueva enfermedad de origen natural (un bloom de algas) afectó a los salmonicultores. Imaginen el daño que una enfermedad importada podría causar, no solo a nuestra industria salmonera, sino también, potencialmente, al medioambiente en general”, agregó.
“La industria salmonera chilena presenta una alta prevalencia de patógenos graves”
La posición fue respaldada por el exdirector ejecutivo de Salmon Tasmania, Luke Martin, quien alertó que “la industria salmonera chilena presenta una alta prevalencia de patógenos graves, y debemos garantizar las más estrictas medidas de gestión de riesgos para proteger a la industria australiana”. Martin advirtió que las importaciones desde Chile representan un riesgo “importante” para los productores locales y podrían “potencialmente paralizar toda la industria”. Fue reemplazado recientemente por John Whittington, doctor en algas y exfuncionario del gobierno australiano.
La polémica se desató tras la llegada, el 27 de noviembre de 2024, del primer cargamento de salmón chileno a Australia. El envío, que salió desde Santiago hacia Melbourne en un avión de Latam Cargo, marcó el ingreso formal del producto chileno a ese mercado, luego de que el Departamento de Agricultura, Pesca y Silvicultura (DAFF) reconociera oficialmente a Chile como país exportador, fijando a Sernapesca como la autoridad competente para la certificación sanitaria y de inocuidad.
En diciembre pasado, Salmon Tasmania ya había solicitado formalmente al gobierno reconsiderar la autorización, advirtiendo sobre riesgos sanitarios.
El resultado de las elecciones del 3 de mayo será clave para determinar si el salmón chileno podrá continuar expandiéndose en el mercado australiano o si, por el contrario, enfrentará nuevas barreras comerciales.