La asociación de Médicos Veterinarios vinculados a acuicultura declara su malestar por publicación de informe que contiene errores de información. Ante el informe “Uso de antibióticos en la salmonicultura chilena...
La asociación de Médicos Veterinarios vinculados a acuicultura declara su malestar por publicación de informe que contiene errores de información.
Ante el informe “Uso de antibióticos en la salmonicultura chilena en 2018”, emitido y publicado por la ONG Oceana el jueves 22 de octubre de 2020 y enmendado el 23 de octubre de 2020, MEVEA CHILE A.G., asociación que reúne a profesionales Médicos Veterinarios vinculados a la actividad
acuícola, declara lo siguiente:
- Consideramos muy preocupante el informe publicado, ya que contiene serios y múltiples errores e imprecisiones en la presentación de las cantidades de antimicrobianos utilizados por la industria y por algunas empresas en particular, generando desinformación y alarma
en la opinión pública respecto de la gestión y uso de antimicrobianos en la salmonicultura. - La misión del Médico Veterinario es velar por el bienestar y la salud animal, como lo establece la FAO en su “Guía Técnica para certificación en Acuicultura” del año 2011, en su capítulo de salud y bienestar animal, donde señala: “las actividades de acuicultura deberían conducirse de una manera que asegure la salud y bienestar de los animales de granjas acuícolas, mediante la optimización de la salud, minimizando el estrés, reduciendo los riesgos de enfermedad animal manteniendo un medioambiente de cultivo saludable en
todas las fases del ciclo productivo”. - En este sentido, los Médicos Veterinarios hemos gestionado acciones concretas y voluntarias al interior de la industria productora de salmones que han permitido concretar una sostenida tendencia a la reducción en la necesidad de utilización de aplicación de
terapias para control de enfermedades bacterianas. - Por su parte, la OIE, en el capítulo de “Introducción a la recomendación para el bienestar de los animales”, artículo 7.1.1. del Código Sanitario para los Animales, establece lo siguiente: “las buenas condiciones de bienestar de los animales exigen que se prevengan
sus enfermedades y se les administren los tratamientos veterinarios, que se les proteja, maneje y alimente correctamente, y que se les manipule y sacrifique de manera compasiva”. - El uso de antibióticos por parte de los Médicos Veterinarios se realiza de manera responsable, con un fuerte compromiso de reducir su uso, de acuerdo con los lineamientos de “ONE HEALTH” promovidos por la OIE-OMS y la FAO, iniciativa que busca disminuir la resistencia bacteriana a los antimicrobianos.
- La administración de antimicrobianos sólo se realiza frente a enfermedades bacterianas, posterior a un diagnóstico veterinario, siempre bajo prescripción Médico Veterinaria y usando productos registrados y autorizados para la acuicultura por parte del SAG, y bajo el control de Sernapesca.
- En el mencionado informe, se publica un índice de uso de antibiótico por empresas productoras, construido a partir de la relación de antibiótico utilizado respecto de las toneladas de salmónidos cosechados, en el que claramente no se hizo una verificación seria
ni responsable de los antecedentes publicados, ya que a todas luces el gráfico indicaba que las cifras no se ajustaban a la realidad. - Si bien la mencionada ONG enmendó parte de la información publicada, aún persisten graves inconsistencias en el informe, reflejando falta de rigurosidad en el manejo de la información, por lo que solicitamos una aclaración pública respecto del contenido del
informe. Aun cuando Oceana explicó en otra publicación del día 23 de octubre del 2020 que el origen del error del documento publicado está en la información recibida de Sernapesca vía ley de transparencia, el informe publicado es de responsabilidad de quien lo ha emitido,
vale decir, ONG Oceana. - Como profesionales Médicos Veterinarios, desde MEVEA CHILE AG hacemos un llamado público a la precaución, responsabilidad y a promover un buen uso de este tipo de información, con la única intención de asegurar que las personas reciban información
confiable y fidedigna.