Actividad pesquera desarrollada en la Región del Biobío durante los primeros 20 días del año 2020 está marcada por el jurel industrial y artesanal, principalmente en las Comunas de Coronel,...
Actividad pesquera desarrollada en la Región del Biobío durante los primeros 20 días del año 2020 está marcada por el jurel industrial y artesanal, principalmente en las Comunas de Coronel, Lota y Talcahuano, como así mismo con el recurso reineta en la comuna de Lebu (Mundo Acuícola).
La extracción, desembarque, transformación y comercialización de recursos pesqueros constituyen actividades que le otorgan al sector pesquero regional el primer lugar en importancia económica y social en el contexto nacional. La actividad pesquera desarrollada en la Región del Biobío durante los primeros 20 días del año 2020 está marcada por el jurel industrial y artesanal, principalmente en las comunas de Coronel, Lota y Talcahuano, como así mismo con el recurso reineta en la comuna de Lebu.
Desde el punto de vista de la pesca industrial, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura ha cubierto el 100% de la certificación de desembarques, correspondientes a 8 armadores industriales que operan en la macrozona centro sur. Claudio Báez, Director Regional de Sernapesca Biobío, informó que «el recurso Jurel Industrial es el que marca la operación en estas primeras semanas con un total desembarcado de más de 17 mil toneladas, principalmente en la Comuna de Coronel, con un 56% de las recaladas, seguido de Talcahuano con el 44%. En relación a la fauna acompañante de este recurso, la caballa a la fecha representa menos del 1% del total desembarcado. Asimismo, la jibia ha aparecido como fauna acompañante pero en porcentaje de 2% del total desembarcado». Seguido del recurso jurel industrial, se encuentra el recurso merluza común, con 558 toneladas desembarcadas y la operación de 2 pesqueros de Alta Mar, cubiertas en un 100% con la certificación de desembarques por parte de Sernapesca.
Sector artesanal
En relación a las embarcaciones pesqueras artesanales mayores a 12 metros de eslora, la actividad a la fecha queda marcada por la operación en el recurso Jurel, cuya cuota ya fue consumida. En cuanto a las embarcaciones menores de 12 metros de eslora y que se encuentran obligadas a certificar por encontrarse inscritas en pesquerías pelágicas con el arte de cerco, «certificamos el 100% de su actividad en el recurso Jurel, con destino a plantas de harina, que equivale a 191 embarcaciones distribuidas en Coronel, Lebu, Talcahuano y Tomé», sostuvo el director regional de Sernapesca Biobío.
Por último el recurso reineta para este grupo de embarcaciones, es decir menores a 12 metros de eslora y según el compromiso adquirido por esta Dirección Regional, «hemos cubierto el 38% del total de 164 recaladas. Son cifras que van cambiando día a día, pero que dan cuenta de la importancia de la actividad pesquera en la región del Biobío, pues seguimos manteniendo el liderazgo nacional en cuanto al volumen de desembarque de recursos», sostuvo Báez.