Se presentó la distribución de la extracción de centolla y cuánto se podría extraer en la región de Magallanes, para hacer un mejor manejo del recurso. Los investigadores piensan que...
Se presentó la distribución de la extracción de centolla y cuánto se podría extraer en la región de Magallanes, para hacer un mejor manejo del recurso. Los investigadores piensan que se podría extraer la misma cantidad o un poco menos (Mundo Acuícola-Centro IDEAL).
El crustáceo bentónico de los fondos marinos australes que continúa asegurando ingresos a los pescadores artesanales del extremo sur del país es la centolla (Lithodes santolla), pero su pesca está rodeada por incertidumbre y datos pocos confiables con relación a su extracción.
Lorenzo Palma, Centro IDEAL. Fabio Bozzeda, Sandra Marín y Laura Nahuelhual, son investigadores del Centro de Investigación Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (IDEAL) de laUniversidad Austral de Chile, y recientemente publicaron en la revista académica Progress in Oceanography (Elsevier), un análisis de 10 años (2006 – 2016) del registro de pesca de centolla, de 250 embarcaciones de pescadores artesanales inscritos en la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, de un total de 493.
Entre las medidas de manejo de la especie se encuentra la veda reproductiva, solo se deben capturar machos y el tamaño varía entre regiones. Este recurso es explotado por pescadores artesanales que la extraen usando trampas de metal.
“Pese a que captura de la centolla es una pesquería artesanal, sus volúmenes de extracción son similares a los de una pesca industrial (más de 4.000 toneladas por año). Hasta la fecha es difícil la obtención de datos certeros sobre el tamaño real del stock de pesca, ya que se sabe que existe pesca no declarada cuya magnitud no ha sido medida”, mencionó el Dr© Fabio Bozzeda.
En el estudio se combinaron datos de desembarque y de variables ambientales del ecosistema que habita la centolla y se concluyó que los barcos que declaran más de 2 toneladas de centolla por salida de pesca, muy probablemente están incluyendo pesca ilegal no declarada o “blanqueada”, por los reconocidos como superpescadores,“quedan en evidencia entre sus propios pares, ya que por el tamaño de las embarcaciones, la cantidad de tripulantes y el equipo de pesca, parece muy poco probable alcanzar esa cantidad de centollas por cada salida”, explicó Bozzeda.
Otro resultado relevante, comentó el investigador, es la identificación de las zonas donde los pescadores extraen mayoritariamente el recurso “Estamos hablando de las zonas extremas de la región, alejadas de la fiscalización. Para la sostenibilidad de la pesquería es necesario distribuir mejor los sitios de pesca la centolla”.
Sobre la importancia de distribuir los sitios de captura, la investigadora Sandra Marín dijo en base a estos resultados es posible evaluar con mejor información la distribución del esfuerzo en el área de extracción puesto que se identificó áreas donde la explotación parece excesiva y en otras donde podría ser posible una mayor extracción.
Un producto interesante del estudio fue presentar la distribución de la extracción de centolla y cuánto se podría extraer en la región de Magallanes, para hacer un mejor manejo del recurso. Los investigadores piensan que se podría extraer la misma cantidad o un poco menos.
Bozzeda planteó un enfoque precautorio para localizar otros sitios alternativos a la pesca de la centolla, que hasta el momento están concentrados principalmente en los extremos de la región. En una de las próximas reuniones del Comité de manejo de Centolla y Centollón de la Región de Magallanes y Antártica Chilena, se presentarán estos resultados.
Del análisis de 10 años de datos, la Dra. Laura Nahuelhual comentó sobre la importancia de la generación de datos más sistemáticamente que permitan evaluaciones del tamaño del stock con cada vez menos incerteza. “Una información crítica es registrar el número de trampas por embarcación lo que permitiría estimar con mayor precisión el esfuerzo de pesca y los efectos de la pesca artesanal sobre el recurso centolla”, expresó la investigadora.