Reproducimos la columna de Javier Lopatin, académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias UAI e investigador de Data Observatory.
«Los humedales son ecosistemas de transición tierra-agua, donde el agua es el principal factor que controla el ambiente y su respectiva vida vegetal y animal. Una definición amplia de humedales incluye tanto los ecosistemas de agua dulce como los marinos y costeros, en un amplio abanico de manifestaciones geográficas. Los humedales son fundamentales para las personas y la naturaleza e incluyen contribuciones medioambientales, climáticas, ecológicas, sociales, económicas, científicas, educativas, culturales, recreativas y estéticas al desarrollo sostenible y al bienestar humano.»
«Aunque solo cubren alrededor del 6% de la superficie terrestre, el 40% de todas las especies vegetales y animales viven o se reproducen en humedales. La biodiversidad de los humedales es importante para nuestra salud, nuestro suministro de alimentos, el turismo y el empleo. Más de mil millones de personas en todo el mundo dependen de los humedales para su subsistencia. Además, los humedales son una solución natural a la amenaza mundial del cambio climático, ya que absorben dióxido de carbono, contribuyendo así a frenar el calentamiento global y a reducir la contaminación. Lamentablemente, los humedales están desapareciendo tres veces más rápido que los bosques, siendo el ecosistema más amenazado de la Tierra.»
«En los últimos 50 años, se ha perdido el 35% de los humedales del mundo. Las actividades humanas que conducen a la pérdida de humedales incluyen el drenaje y el relleno para la agricultura y la construcción, la contaminación, la sobrepesca y la sobreexplotación de los recursos, las especies invasoras y el cambio climático. Esta creciente pérdida es el resultado de considerar erróneamente a los humedales como tierras baldías y vertederos, en vez de fuentes vitales de vida y empleo.»
«Un reto clave es cambiar la mentalidad para animar a gobiernos y comunidades a valorar y dar prioridad a los humedales. Chile no se ha quedado atrás e impulsa el proyecto GEF de Humedales Costeros, liderado por el Ministerio de Medio Ambiente, que busca hacer una gestión sustentable de humedales costeros en varias regiones piloto. Asimismo, este proyecto impulsó de forma asertiva la reciente promulgación de la Ley de protección a los humedales urbanos a nivel nacional.»
«Chile y el mundo tienen el desafío de encontrar mecanismos eficientes de gestión sustentable en estos ecosistemas. Es necesario monitorear continuamente el cumplimiento de los estándares ambientales y de edificación, lo que solo es posible mediante el uso de datos de imágenes satelitales y de herramientas de machine y deep learning, información accesible hoy usando la plataforma nacional de datos abiertos Data Cube Chile (https://datacubechile.cl/), repositorio administrado parcialmente por la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI), Data Observatory y CSIRO Chile; que actualmente monitorea la expansión urbana ilegal en humedales urbanos mediante una colaboración con la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), la Ministerio del Medio Ambiente (MMA) y el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) mediante un proyecto Fondef. Si bien vamos en la dirección correcta, más esfuerzos son necesarios para mantener este legado natural a lo largo de toda la costa, valles y cordillera de nuestro país.»