Se convirtió en el primer productor pelágico del mundo en validar la trazabilidad y calidad de la materia prima utilizada en este proceso.
FoodCorp es una compañía pesquera de capitales noruegos con presencia en Chile desde 1991. Cuenta con una planta de proceso en la comuna de Coronel, Región del Biobío, donde elabora congelados, conservas, harina y aceite de pescado principalmente a partir de jurel, sardina y anchoveta.
Un importante aporte a la sustentabilidad pesquera concretó FoodCorp, compañía con operaciones en la Región del Biobío que obtuvo la certificación ORIVO sobre gestión responsable de biomasas y productos elaborados.
Aunque la compañía orienta su producción en forma creciente al consumo humano, volumen que actualmente sobrepasa el 80% de su proceso, certificar todas sus capturas es un desafío corporativo y de la industria pesquera. Así lo reconoció Andrés Daroch, gerente general de FoodCorp, al plantear que “reconocemos la creciente demanda de transparencia y trazabilidad en la cadena de suministro. Como industria pesquera hemos avanzado en forma ostensible en la última década en trabajar bajo normas internacionales que se alinean directamente con la sustentabilidad de la pesca”.
Relevancia
ORIVO es una certificadora noruega dedicada a acreditar el origen y autenticidad de los ingredientes y productos alimenticios para consumo humano directo e indirecto, como harina y aceite de pescado. En concreto, permite documentar y verificar, a través de análisis en laboratorios avanzados, el origen y naturaleza de la materia primera utilizada en la elaboración de estos productos destinados en mayor medida a nutrición animal.
En el primer semestre de 2022, FoodCorp destinó un 81,74% de la materia prima procesada a la elaboración de congelados y conservas para consumo directo, comercializados tanto en el mercado chileno o en el extranjero. El restante 18,26% – que recoge descartes y pesca no apta para consumo humano directo está compuesto por 26 mil toneladas de sardina y anchoveta adquirida a artesanales, además de 11 mil de jurel de captura propia- se destinó a harina y aceite que es usada por terceros para la elaboración de productos destinados a alimentación animal. Por lo mismo, Andrés Daroch recordó que “es importante que nuestros clientes tengan una acreditación basada en evidencia del alto nivel de calidad que les prometemos. Esta norma certifica que en nuestra harina y aceite sólo usamos lo que decimos y que no hay otras especies ni otros ingredientes, lo que es una garantía de calidad y manejo sostenible de las pesquerías”.
La base de la calidad es la frescura de la materia prima, aspecto en que destacó la asociatividad lograda con los proveedores artesanales. “Hemos construido una relación de largo plazo en que se aplican los mismos criterios de captura y conservación de la materia prima. Los proveedores artesanales representan un volumen mayoritario del abastecimiento de sardina y anchoveta, que es la base de nuestra producción destinada a consumo humano indirecto, por lo que esta certificación también reconoce ese trabajo y esa relación asociativa”.
ORIVO promueve una exigente trazabilidad basada en la evidencia, por lo que es un reconocimiento logrado por pocas compañías a nivel global. “Estamos muy orgullosos de convertirnos en el primer productor de harina y aceite de pescado pelágico en el mundo que lleva la transparencia al siguiente nivel al calificar para la certificación ORIVO”, cerró Andrés Daroch.