El presidente de Fedepes encuentra incomprensible que después de todos los escándalos de corrupción los industriales se atrevan a darle un ultimátum al gobierno y los parlamentarios. (Mundo Acuícola). “La...
El presidente de Fedepes encuentra incomprensible que después de todos los escándalos de corrupción los industriales se atrevan a darle un ultimátum al gobierno y los parlamentarios. (Mundo Acuícola).
“La industria pesquera amenaza con que va a cerrar plantas en Chile y se las va a llevar a Perú y Ecuador si se les prohíbe hacer pesca de arrastre con la jibia. Esto demuestra que no les importa Chile ni sus trabajadores, solo quieren ganar plata; así que es hora que el gobierno se ponga los pantalones y empareje la cancha a favor de los artesanales, que somos la verdadera pesca chilena. Si los industriales se quieren ir a Perú y Ecuador, ¡que se vayan!”, dijo Rosendo Arroyo, presidente de la Federación de Pescadores Artesanales del Biobío (Fedepes Biobío).
Arroyo recordó que la semana pasada nueve agrupaciones de pescadores presentaron ante el gobierno en caleta Lo Rojas la “Propuesta para una ley de pesca justa y democrática para el sector pesquero artesanal”. Documento que precisamente pide eliminar la pesca de arrastre que los industriales quieren perpetuar, recuperar la cuota de sardina artesanal anterior a 2013, unificar los recursos sardina y anchoveta, combatir la pesca ilegal y estatizar los recursos pesqueros, “para que no haya inescrupulosos que se crean dueños de la pesca, como está pasando con la jibia”, agregó el dirigente.
El presidente de Fedepes encuentra incomprensible que después de todos los escándalos de corrupción los industriales se atrevan a darle un ultimátum al gobierno y los parlamentarios. Más cuando en Los Rojas. Hace meses que los artesanales levantaron banderas negras para que les devuelvan la cuota de 611 mil toneladas de sardina que tenían antes de la Ley Longueira, y que hoy está reducida a menos de una tercera parte.
“Nos prometieron que si apoyábamos la Ley Longueira en 2012 íbamos a subir nuestra cuota de sardina de 611 mil toneladas a 680 mil. ¿Y qué tenemos? Que llevamos cinco años con una cuota que no supera las 230 mil toneladas. Por eso hay artesanales que ya no pueden cubrir los costos para salir a pescar. Nos están destruyendo”, señaló Arroyo.
El presidente de Fedepes advirtió que los estudios del IFOP han arrojado que el recurso sardina está sano, pero el Comité Científico Técnico mantiene la misma cuota de los años anteriores porque ocupa una metodología de cálculo de biomasa anticuada, que está en desuso en los principales países pesqueros como Perú.