El Altiplano exhibe duras condiciones para la vida, incluyendo amplias oscilaciones de temperatura entre el día y la noche, alta radiación ultravioleta, baja humedad y presión parcial reducida de oxígeno....
El Altiplano exhibe duras condiciones para la vida, incluyendo amplias oscilaciones de temperatura entre el día y la noche, alta radiación ultravioleta, baja humedad y presión parcial reducida de oxígeno. A pesar de esto, se sabe que varios organismos están bien adaptados para vivir y prosperar en estos entornos de gran altitud, entre ellos el pez Karachi (Orestias ascotanensis).
Orestias ascotanensis (Cyprinodontidae) es un pez endémico de los manantiales del Altiplano chileno (3.700 msnm) y representa una oportunidad para estudiar adaptaciones a ambientes acuáticos de gran altitud.
Así fue como los investigadores AlexDi Genova, GinoNardocci, RodrigoMaldonado-Agurto, Christian Hodar, Camilo Valdivieso, Pamela Morales, Felipe Gajardo, Raquel Marina, Rodrigo A. Gutiérrez, Ariel Orellana, Veronica Cambiazo, Mauricio González, Alvaro Glavic, Marco A. Mendez, Alejandro Maass, Miguel L.Allende, Martin A.Montecino, realizaron la investigación «Genome sequencing and transcriptomic analysis of the Andean killifish Orestias ascotanensis reveals adaptation to high-altitude aquatic life».
Así fue como el análisis comparativo del genoma de O. ascotanensis mostró un proceso general de contracción, incluida la pérdida de genes relacionados con la señalización de la proteína G, la quimiotaxis y la transducción de señales, mientras que hubo expansión de familias de genes asociadas con el movimiento basado en microtúbulos y la ubiquitinación de proteínas.
«Identificamos 818 genes bajo selección positiva, muchos de los cuales están involucrados en la reparación del ADN. Además, identificamos microARN nuevos y conservados expresados en O. ascotanensis y su especie estrechamente relacionada, Orestias gloriae», señala la investigación.
«Nuestro análisis sugiere que la selección positiva y la expansión de genes que preservan la estabilidad del genoma son un mecanismo de adaptación potencial para hacer frente al aumento de la radiación UV solar a la que están expuestos los animales de gran altitud», concluyen.
Conozca el detalle de estudio aquí.