A la preocupación se suma la tramitación de cerca de 12 proyectos de la industria salmonicultoras en sus costas, lo que se ha catalogado como una “perforación encubierta” de las...
A la preocupación se suma la tramitación de cerca de 12 proyectos de la industria salmonicultoras en sus costas, lo que se ha catalogado como una “perforación encubierta” de las 5 millas exclusivas de la pesca artesanal. (Mundo Acuícola).
Preocupación existe en el sector pesquero artesanal por el desembarque en el puerto de Talcahuano de 100 toneladas de salmón en descomposición, con altos contenidos de ácido sulfhídrico, por parte del wellboat “Seikongen” proveniente del sector de Pilpilehue, en la comuna de Chonchi, región de Los Lagos, lugar donde se mantenía hundida desde hace casi diez meses.
Los pescadores temen a los efectos medioambientales que acarreará una operación de estas características y por la contaminación con floraciones algales nocivas (FAN) que se podrían trasladar por medio de la embarcación hacia aguas penquistas.
A lo anterior se suma la presentación de 12 proyectos de la industria salmonera en sus costas, lo que a juicio del presidente de la A.G. de pescadores artesanales de San Vicente y director de Conapach, Cesar Jorquera, es una perforación encubierta a las 5 millas exclusivas de la pesca artesanal.
“Estamos en alerta porque la región de Biobío es la principal zona de desove y crianza de pequeños pelágicos (sardina y anchoveta) de la MacroZona V-X Regiones, peces que son la fuente principal de alimentación de muchos otros recursos extraídos por la pesca artesanal”, declaró el dirigente.
“Por otra parte, pensamos que las Concesiones Marítimas que el Estado chileno entrega dentro de las 5 millas artesanales a las salmoneras son verdaderas «perforaciones encubiertas» del sector industrial”, enfatizó.
Jorquera añadió además que “no nos vamos a dejar engañar con el viejo cuento del empleo. Esta es una industria cuyo principal objetivo es maximizar sus ganancias a costa del perjuicio de las comunidades costeras”.
Según señaló el dirigente esperan que las autoridades regionales no se conviertan en cómplices de la invasión, contaminación y usurpación de su caladeros históricos por parte de una industria que “ha comprometido gravemente los recursos marinos en las regiones más australes del país, mediante una nefasta seguidilla de ensayos y errores que han afectado de forma irreversible las comunidades costeras”.