Visión 2030: Publican diez Libros Blancos con estrategias para enfrentar los desafíos globales de los océanos y garantizar su sostenibilidad para el futuro.
En el marco del Decenio de los Océanos, el grupo de trabajo Visión 2030 coordinado por la Comisión Oceanográfica Intergubernamental de la UNESCO (COI-UNESCO), publicó recientemente una serie de diez Libros Blancos que emanaron del análisis de un centenar de expertos internacionales, convocados para aportar a cada uno de los diez desafíos específicos que persigue el programa.
Visión 2030, es un proceso estratégico orientado a identificar medidas de cumplimiento y éxito para cada uno de los 10 Desafíos Decenio del Océano, que se enfocan en combatir la contaminación marina; avanzar en protección de ecosistemas marinos; alimentar a la población global; avanzar hacia una economía oceánica sostenible; buscar soluciones ante el cambio climático; o cambiar la relación de la humanidad con los océanos, entre otros.
«Estas revisiones identifican brechas científicas y de capacidades para abordar los distintos desafíos. En mi caso participé en dos de los desafíos planteados, en que los puntos más relevantes tienen que ver con focalizar el desarrollo sostenible, las pesquerías y la acuicultura alrededor de temáticas de equidad y de sostenibilidad en el largo plazo. Estos documentos posicionan y reconocen las necesidades que tienen los países que están en desarrollo y aquellos que deben mejorar sus sistemas alimentarios acuáticos”, explica Stefan Gelcich, director del Instituto Milenio en Socio-Ecología Costera (SECOS) y académico de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Católica.
Los reportes, culminan un trabajo de más de un año por parte de representantes de gobiernos, organizaciones intergubernamentales, sector privado, comunidades indígenas y locales, ONGs, instituciones académicas y fundaciones filantrópicas, y representan diversos grupos demográficos, de género y de edad, coordinados a su vez por co-presidentes expertos para cada desafío específico. Así, los Libros Blancos profundizan en los recursos, las infraestructuras, las asociaciones, el desarrollo de capacidades y las soluciones tecnológicas necesarias para alcanzar los objetivos de aquí a 2030.
Alimentos y nutrición sostenibles
El océano, ha nutrido a la humanidad durante miles de años, hoy millones de personas dependen de él para alimentarse y obtener sustento. Pero la capacidad del océano para alimentarnos se ve amenazada por el cambio climático, la contaminación, la sobrepesca y la pérdida de biodiversidad.
Garantizar que los océanos puedan seguir alimentando de manera sostenible a la población mundial es una prioridad y el foco del Desafío 3 del Decenio de los Océanos. Es así como grupos de expertos de todo el mundo investigan cómo optimizar el papel de los océanos en la alimentación sostenible de la población mundial.
Entre las recomendaciones que propone el reporte para este desafío, destacan el promover un cambio de paradigma hacia un enfoque holístico de «un sistema alimentario”, que adopte un enfoque centrado en la nutrición y la salud humana; dar prioridad a cerrar brechas críticas en la ciencia y el conocimiento; involucrar a las comunidades locales en el co-diseño de la investigación científica, con especial atención a la pesca y la acuicultura a pequeña escala y; aprovechar las asociaciones existentes y crear nuevas colaboraciones, incluida la cooperación público-privada para avanzar en materia de datos, tecnología, innovación y desarrollo de capacidades.
Una economía oceánica sostenible
Se calcula que la economía oceánica mueve entre 3 y 6 trillones de dólares al año, lo que repercute en la subsistencia y medios de vida de más de 3.000 millones de personas en todo el mundo. Pero no se trata solo del comercio, sino de fomentar una prosperidad equitativa protegiendo al mismo tiempo los ecosistemas marinos.
Así, el Desafío 4 del Decenio de los Océanos sobre la economía oceánica está estrechamente interrelacionado con los otros Desafíos del Decenio, y tiene como objetivo fomentar un futuro en el que el océano siga siendo una fuente de vida, inspiración, vitalidad, cultura y oportunidades sociales y económicas.
El reporte sobre este desafío, entrega recomendaciones para establecer marcos de acción basados en el conocimiento, incluidos planes oceánicos sostenibles para la toma de decisiones y la formulación de políticas informadas; desarrollar ciencia y conocimientos necesarios para crear mecanismos financieros específicos de apoyo a proyectos de economía oceánica sostenibles y resistentes al cambio climático; dar prioridad a las soluciones creadas conjuntamente con la industria para facilitar la adopción de prácticas sostenibles y resilientes; mejorar la accesibilidad de los datos y la formación de capacidades para fomentar la comprensión y el compromiso con el uso sostenible de los océanos.