Un suministro seguro y permanente de agua potable permitirá a los pescadores potenciar su trabajo cotidiano, vinculado con la producción de locos, pulpos y erizos (Mundo Acuícola). Un antiguo anhelo...
Un suministro seguro y permanente de agua potable permitirá a los pescadores potenciar su trabajo cotidiano, vinculado con la producción de locos, pulpos y erizos (Mundo Acuícola).
Un antiguo anhelo de los pescadores de caleta San Marcos, Región de Tarapacá, se hace realidad: contar con un suministro permanente y seguro de agua potable.
El recurso hídrico proviene de una planta desalinizadora, financiada por el Gobierno de Chile, que está lista para ser inaugurada, tras ser sometida a pruebas técnicas y sanitarias.
Hasta ahora, los pescadores de la apartada caleta San Marcos dependían de un camión aljibe para acceder al agua, lo que generaba complicaciones cotidianas y obstaculizaba su desarrollo productivo.
Desde la dirección zonal Subpesca en Iquique se detalló que la desalinizadora permitirá a la caleta aprovechar todo el potencial de dos instalaciones productivas existentes en el lugar: una sala de procesos y un túnel de frío (refrigeración).
Allí, gracias al agua potable, los pescadores tendrán la posibilidad de agregar valor a los productos que extraen: pulpo, erizo y loco, entre otros.
Cómo opera
La Agenda Social dispuesta por el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera en beneficio del sector artesanal considera -entre otras medidas- la entrega de 10 obras de este tipo en distintas zonas del país.
Estas instalaciones captan agua del mar y la convierten en apta para el consumo humano, tras someterla a un proceso de tratamiento y filtrado (osmosis inversa).
Las desaladoras tienen un funcionamiento amigable con el medio ambiente, pues se alimentan con energía proveniente de paneles solares.