Reproducimos la columna de opinión de Cristian Rojas, Gerente Técnico de Salmoclinic, quien analiza el uso de antiparasitarios en salmones.
«La acuicultura enfrenta constantes desafíos en el manejo de parásitos, y la elección de antiparasitarios adecuados se vuelve crucial. Con el aumento de la demanda global de productos acuáticos, el uso de herramientas farmacológicas como hexaflumuron y Lufenuron se destaca por su eficacia prolongada y capacidad para interrumpir el ciclo de vida de los parásitos. Sin embargo, surge un dilema con los antiparasitarios de acción inmediata, como el peróxido de hidrógeno, que, si bien son efectivos, carecen de residualidad, lo que plantea desafíos para mantener la protección a largo plazo.
El equilibrio entre la necesidad de controlar los parásitos y los posibles impactos en la salud de los peces en los centros de cultivo es crucial, la frecuencia y diversidad en el uso de antiparasitarios deben ser parte de una estrategia bien pensada. La variabilidad operativa, la disponibilidad de distintas herramientas y la colaboración entre centros geográficos son aspectos esenciales a considerar, ya que no existe una fórmula única en esta compleja ecuación y se requiere una evaluación constante y proyección a largo plazo para garantizar la salud de la industria.
Desde el punto de vista de la administración de antiparasitarios, la inyección individual se destaca como la opción biológica óptima, pero con un alto impacto en el bienestar de los peces y posible compromiso en planta de proceso. Los productos orales, de entrega a través del alimento, son buena opción pero tienen mayor incertidumbre en la correcta dosificación a causa de lo variable, por diversos motivos, que puede ser la ingesta individual. Sin embargo, la opción de baño se complementa con los avances que ofrece Salmoclinic en su MN Owurkan con el sistema de degradación, la que entrega soluciones para mitigar los impactos en el medio ambiente. La eficiencia y eficacia de los métodos Salmoclinic se entrelazan con el bienestar de los peces, cuidado del medioambiente y la certeza de la dosis administrada, planteando desafíos y oportunidades para la industria.
La resistencia parasitaria es una sombra que acecha la industria acuícola y a cualquier industria de producción animal, la obsolescencia de moléculas depende de diversos factores, desde la frecuencia de uso hasta las condiciones de cultivo. Para abordar este riesgo, la industria debe adoptar políticas a largo plazo y buscar constantemente nuevas herramientas que minimicen la generación de resistencia. La colaboración entre el sector privado y público es esencial para respaldar investigaciones y regulaciones que promuevan prácticas más sostenibles.
Hablando de sostenibilidad, las regulaciones desempeñan un papel crucial en la acuicultura; la industria salmonicultora está sujeta a estrictas normativas, desde el registro de productos farmacéuticos hasta la supervisión de Directemar y las normas específicas de Sernapesca. Estas medidas buscan garantizar la eficacia, seguridad y sostenibilidad de los antiparasitarios utilizados en los centros de cultivo, contribuyendo así a la protección del medio ambiente acuático.
El monitoreo y evaluación para que los antiparasitarios sean efectivos, son eslabones vitales en esta cadena de cuidado. Las empresas realizan un seguimiento continuo de la carga parasitaria, mientras que la autoridad, a través de la Prescripción Médico Veterinaria, supervisa y analiza los tratamientos en línea. Sin embargo, la discusión sobre la representatividad de las muestras destaca la necesidad de mantener un equilibrio entre la eficacia y los costos asociados a la evaluación.
Finalmente, los efectos secundarios del uso prolongado de antiparasitarios en los ecosistemas son una preocupación legítima, aunque estos productos están diseñados para objetivos específicos, la naturaleza puede adaptarse, generando la necesidad de políticas multifactoriales a largo plazo. La industria debe acelerar la búsqueda de innovación y respaldar la investigación para avanzar y lograr una acuicultura más sostenible y responsable.»