Aunque el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura mantiene una notable paridad de género entre sus funcionarios, no es habitual que una oficina sea atendida solamente por mujeres, y menos...
Aunque el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura mantiene una notable paridad de género entre sus funcionarios, no es habitual que una oficina sea atendida solamente por mujeres, y menos en una caleta artesanal (Mundo Acuícola-Sernapesca).
Desde el primero de enero de este año, cuatro mujeres integran la oficina de Sernapesca en Queule, provincia de Cautín. Se trata de la principal caleta pesquera artesanal de La Araucanía, con el 99 por ciento de los desembarques de la región. Hasta el año pasado, dos mujeres trabajaban en esa oficina, y ahora –como consecuencia de la modernización del Servicio- se incorporaron dos nuevas certificadoras: Claudia Macarena Mera Rifo y Danitza Andrea Noriega Noriega.
En general, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura mantiene una notable paridad de género entre sus funcionarios. Pero no es habitual que una oficina sea atendida solamente por mujeres. Y menos en una caleta artesanal.
Sin embargo, los resultados han sido óptimos, al igual que la recepción de los pescadores, que destacan la calidad y profesionalismo en la atención de nuestros usuarios.
Este martes, la oficina de Queule se encontraba en etapa de acreditación física del arte de pesca para acceder a los cupos de Reineta. El procedimiento se aplica conforme al corrimiento de lista de espera para este recurso y los cupos para Araucanía son 19.
En Caleta Queule, el 68 por ciento de los desembarques corresponde a Corvina (que ha experimentado una importante recuperación en los últimos años), un 12 por ciento a Cojinoba del sur, un 11 por ciento a Cojinoba del norte, y un 9 por ciento a otros recursos, entre ellos pejegallo y sierra.
La certificación de desembarques garantiza la trazabilidad, aportando a la sustentabilidad de los recursos pesqueros y mejorando los ingresos de los pescadores. Al mismo tiempo, la Ley de Caletas da la oportunidad de ejercer otras actividades, y promueve inversiones para mejorar las condiciones de inocuidad en los puntos de desembarque y locales de venta. Así las caletas se convierten en un verdadero polo de desarrollo para su comunidad y la región.
Todo un desafío para la oficina de Queule, cuyas funcionarias fueron visitadas recientemente por la Directora Nacional, Alicia Gallardo