Cerca de 400 embarcaciones chinas pescan frente al mar peruano para la pesca de jibia, acompañadas de buques madrinas que les brindan de combustibles y provisiones, y donde realizan sus...
Cerca de 400 embarcaciones chinas pescan frente al mar peruano para la pesca de jibia, acompañadas de buques madrinas que les brindan de combustibles y provisiones, y donde realizan sus descargas, dijo Alfonso Miranda, de Calamasur (Diario Gestión.pe).
Preocupa la persistente reducción de las capturas de calamar gigante, conocido como pota o jibia, en el Pacífico Sur, lo que genera un dramático impacto negativo en las comunidades pesqueras de la región», así lo indicó Alfonso Miranda, presidente del Comité para el Manejo Sustentable del Calamar Gigante del Pacífico Sur (Calamasur).
Mencionó que unos de los problemas es la alta captura de embarcaciones de China, que viajan frente a las costas peruanas y se concentran en una temporada del año.
«Son cerca de 400 embarcaciones chinas que se desplazan, no solo frente al Perú, sino también frente a las costas de otros países como Argentina, Chile y Ecuador, acompañadas de buques madrinas que les brindan de combustibles y provisiones, y donde realizan sus descargas», expresó.
Alfonso Miranda dijo que esta situación ha hecho que China desplace al Perú, que era el mayor productor mundial de jibia en el 2017 y sostiene que la tendencia seguiría al cierre del 2018 y posiblemente este año.
Menos calamar gigante en Sudamérica
Según datos oficiales, Perú ha pasado de pescar 556 mil toneladas de jibia o calamar gigante del 2014 a aproximadamente 295 mil en 2017. Sin embargo, China extrajo 296 mil toneladas en dicho año, desplazando al Perú.
Alfonso Miranda dijo que es necesario apoyar el manejo adecuado del calamar gigante basado en la ciencia y revertir el actual panorama existente en la zona de pesca de la especie marina.
En ese sentido, indicó -en el marco de la Séptima Reunión de la Comisión del Organización Regional de Ordenación Pesquera del Pacífico Sur (OROP-PS) en la Ciudad de La Haya (Holanda)- que la delegación china reconoció que su flota captura 300 mil toneladas al año, a la vez que coinciden en observar una declinación de la pesca de calamar gigante en los últimos años.
“China aceptó que se necesita hacer el mayor esfuerzo por investigar el comportamiento de este importante recurso transzonal”, puntualizó.
Sin embargo, detalla que existen dudas debido a la falta de verificación de los datos recibidos por la OROP –PS y la insuficiente fiscalización, seguimiento y sanción de la pesca ilegal, a pesar de los esfuerzos realizados por los países ribereños.
En ese sentido, Alfonso Miranda manifestó que los países miembros de Calamasur plantearon que el Comité Científico de la OROP – PS establezca un subgrupo, liderado por un científico independiente, que haga una evaluación del stock de la pota de la misma manera como se hizo para el jurel.
Asimismo, pidió asegurar que el programa de observadores a bordo proporcione muestras adecuadas y representativas de la flota e implementar un modelo de reporte mensual de capturas, como el que rige en la pesquería del jurel.
Fiscalización y formalización antes de derechos
Alfonso Miranda insistió en la importancia de implantar en breve un sistema VMS (Control Satelital Independiente) que permita a la organización monitorear a las embarcaciones inscritas en su Registro de Buques, a fin de evitar la pesca ilegal.
De otra parte, el Viceministro de Pesca y Acuicultura del Perú, Javier Atkins, reseñó el trabajo en conjunto que viene realizando su despacho con Calamasur y remarcó la importancia de tener en el corto plazo, observadores en la flota que opera en el Pacífico Sur.
De otro lado, ante la propuesta de la aplicación de derechos de pesca para el calamar gigante o pota, Alfonso Miranda dijo que primero debería culminar el proceso de formalización de la pesca artesanal, e intensificar la fiscalización a las embarcaciones, para luego aplicar los derechos de pesca.