Salmonicultoras, organismos públicos y empresas de servicios de robótica y medioambiente presenciaron el seminario: "Boyas oceanográficas y tecnología acústica aplicada al control y detección de restos náufragos".
Compañías salmonicultoras, organismos públicos, y empresas de servicios de robótica y medioambiente presenciaron el seminario «Boyas oceanográficas y tecnología acústica aplicada al control y detección de restos náufragos», realizado ayer miércoles 24 de noviembre en el Hotel Vicente Costanera de Puerto Montt y organizado por Casco Antiguo.
Con más de más de 10 años aportando con soluciones para el buceo deportivo, profesional y militar en el mercado chileno, en los últimos años la compañía ha ido creciendo en áreas como la oceanografía, ofreciendo productos de última tecnología que permiten conocer mejor el océano, logrando implementar proyectos de alta complejidad en el país.
Es precisamente esta experiencia y conocimiento, a la luz de las nuevas normativas medioambientales aplicadas para la acuicultura, las que quiso compartir junto a diferentes clientes y grupos de interés.
«La audiencia del seminario fue muy buena no solo por la concurrencia, sino también porque existió una valiosa variedad de participantes, con clientes frecuentes de Casco Antiguo, representante de la industria salmonera, consultoras, instituciones fiscalizadoras y, en el caso de uno de nuestros expositores, fabricantes de equipos desde el exterior», destacó Gustavo Rival, Director Comercial del Departamento de Oceanografía e Hidrografía de Casco Antiguo.
En resumen, la charla abordó los temas: Configuración de los sistemas de boyas (componentes, dimensiones, sensores y aplicaciones de boyas oceanográficas en el mundo); Calidad del dato en mediciones de corriente y oleaje por medio de doppler y su uso en sistemas de boyas oceanográficas: y Tecnología acústica aplicada a la detección de restos náufragos y herramientas complementarias a ROV como USBL y Multibeam sonar.
«El objetivo central de este seminario fue compartir e intercambiar información, pues tenemos el privilegio de relacionarnos con fabricantes de distintas partes del mundo. Una boya oceanográfica es más que un plástico flotando en el mar, hay toda una ingeniería detrás, donde cada sensor tiene su característica propia. Entonces, la idea central fue destacar eso, aclarar dudas y guiar a nuestros clientes en el mejor camino posible para la toma de decisiones», finalizó Rival.
La instancia también contó con la exposición de Cristóbal Molina, Senior Sales Engineer de Nortek para Latinoamérica y el Mediterráneo, quien resaltó el contexto de la actividad, que coincidió con el desarrollo del 6º Congreso de Oceanografía Física, Meteorología y Clima del Pacífico Sur Oriental.
“Llevamos 20 años suministrando sensores de medición de corriente y oleaje para la acuicultura en Chile, y presentamos los últimos avances y novedades en estas tecnologías», resumió Molina.
Asistentes y reacciones
Desde hace ya varios años, especialistas en sonares y profesionales del área marítima vislumbraron la necesidad de aplicar sus conocimientos en la recuperación de elementos náufragos en acuicultura, mejorando las operaciones con el objetivo de colaborar a la sustentabilidad de la industria y el medioambiente.
Siguiendo esa línea, la empresa Viejo Lobo de Mar se ha anticipado a los nuevos requerimientos sobre recuperación de elementos náufragos en el fondo marino, tanto para la prospección como recuperación de ellos, razón por la cual Alfonso Rival y Javiera García -Gerente General y Especialista en procesamiento de datos de Viejo Lobo de Mar respectivamente- asistieron al seminario organizado por Casco Antiguo para conocer las nuevas tecnologías disponibles.
Otra compañía presente fue Walbusch, empresa proveedora de la industria acuícola-pesquera de Chile, con servicios marítimos, ingeniería ambiental, elementos de fondeo e innovación marina, entre otros.
«El seminario me pareció muy interesante, porque el tema de las boyas no es muy manejado y muestra que existen una serie de instrumentos para medir múltiples variables, las que a su vez se unen para formar una dinámica oceánica nos afecta a todos. Es un ambiente que, como profesionales, siempre tratamos de entender, y las boyas están ayudando mucho en esa línea, ya sea a nivel científico como empresarial», comentó Anastasia Arancibia, oceanógrafa de Walbusch.
*Próximamente, mayores detalles del seminario en la edición diciembre de revista Mundo Acuícola.