El Buque de Instrucción Marítima Capitán Williams es posible gracias a los aportes de los socios de Armasur, Fundación Irarrázaval y otras empresas, que permitirán contar con el pronto zarpe...
El Buque de Instrucción Marítima Capitán Williams es posible gracias a los aportes de los socios de Armasur, Fundación Irarrázaval y otras empresas, que permitirán contar con el pronto zarpe de esta nave educativa pionera de la marina mercante nacional. (Mundo Acuícola).
Las obras de construcción del Buque Escuela Capitán Williams, primer barco de instrucción civil marítima de Chile que Armasur en conjunto con ONG Canales están construyendo para entregar un aula vivencial a todos los alumnos de establecimientos de la red formativa que apoya el gremio, y acortar con ello la brecha entre la educación técnica y las necesidades del mundo productivo.
Ambas organizaciones se reunieron con Fundación Irarrázaval y Fundación Carlos Condell, la primera donó fondos para hacer de esta nave de instrucción marítima una realidad y la segunda estará a cargo de las operaciones desde el inicio de sus funciones, para ver los avances de las obras que darán vida a esta innovación educativa para las futuras generaciones de la Marina Mercante nacional.
En la cita, Orlando Almonacid, presidente de Armasur, explicó la génesis de la idea. “Esto nació hace varios años dentro de nuestros objetivos, porque detectamos con los asociados, que había una falencia en el tema de la educación y por ello creamos ONG Canales, institución que se ha transformado en un elemento importantísimo desde La Araucanía hasta Magallanes, en cuanto al fortalecimiento de los liceos con enseñanza técnico profesional, y siguiendo con esa necesidad surgió esta embarcación como buque de instrucción marítima”, sostuvo.
Aníbal Vial, gerente general de Fundación Arturo Irarrázaval, comentó que “hemos contribuido – en conjunto con otras fundaciones e instituciones – a que este Buque Escuela pueda materializarse como un proyecto para mejorar la calidad del aprendizaje de los estudiantes del Instituto del Mar de Chonchi, pero abierto también a otros establecimientos. La práctica de navegar no existía, todo era a través de simuladores. Ahora, este buque permitirá que las personas experimenten la navegación de manera real y aprendan sobre sus faenas en el mar”, indicó.
Encabezando las operaciones del Buque de Instrucción Marítima, estará Fundación Almirante Carlos Condell. Se espera que durante el último trimestre del año inicie su funcionamiento.
Edmundo González, director ejecutivo de esta organización, dijo que se trata de un proyecto maravilloso que va a cambiar la instrucción técnico profesional en Chile “porque es un laboratorio flotante y práctico para la formación de futuros tripulantes de buque, acuicultores, buzos, elaboradores industriales de alimentos, pescadores. Será el mejor laboratorio de enseñanza práctica. Agradecemos el esfuerzo de Armasur por donar este buque, a la Fundación Irarrázaval por equiparlo y a nosotros como Fundación por operarlo y mantenerlo en los años que esté operativo formando las futuras tripulaciones y marina mercante”, manifestó.
A cargo de coordinar las voluntades de estas instituciones se encuentra ONG Canales, que en su camino de fortalecer la Educación Media Técnico Profesional ha impulsado junto a Armasur el pronto zarpe de esta embarcación. Jorge Pacheco, director de la entidad gremial y presidente de Canales, explicó que este Buque Escuela es un hito para el país y la educación técnica. “Es un buque multiplicador de profesionales ligados al mar, hombres y mujeres, ya que se tiene una parte acondicionada especialmente para ellas que han aumentado su participación en este tipo de trabajos”, expresó.
Así también lo cree Eduardo Carmona, director ejecutivo ONG Canales, quien sostuvo que se trata “de un proyecto que nos pone muy contentos, que nos invita a innovar, a reflexionar y a saber que la vinculación público privada es clave para el desarrollo de una ciudad y de un país. Debemos seguir trabajando para fortalecer la educación pública con proyectos como éste, que busca que los alumnos se puedan embarcar, practicar y contar con la instrucción necesaria para insertarse en el mundo laboral”, dijo.
Equipamiento
El barco fue donado el 2016 por Patagonia Wellboat y desde entonces, la nave ha sido protagonista de una completa transformación en el astillero Skorpios, ubicado en el sector de Chinquihue de Puerto Montt. Avanza en su preparación en los frentes de casco, sala de máquinas, sala de clases y taller; puente de mando y cubierta.
La inversión total del Buque Capitán Williams es cercana a US$1.000.000. El financiamiento para la refacción y el equipamiento de la nave ha sido entregado por los asociados de Armasur y por Fundación Irarrázaval, quien donó 180 millones de pesos canalizados en la fase de acomodación del barco con fines educativos, considerando tecnología de punta que garantiza las mejores condiciones y espacios para aprender.
Radar, ecosonda, carta electrónica con GPS, radio VHF, radio HF, Navtex, anemómetro, Sart, Epirb y compás satelital estarán en distintos puntos del barco, a lo que se suman un dron para toma de imágenes aéreas; un robot submarino (ROV); y un banco de baterías que se abastecerá con paneles solares ubicados en la cubierta más una planta de tratamiento de las aguas grises de la nave, que permitirán que los estudiantes se familiaricen con las energías limpias y las mejores prácticas medioambientales.
También considera una sala de aprendizaje con señales repetidoras de todo el equipamiento del puente, lo que hará que las maniobras que ejecuta el capitán, sean vistas en tiempo real por los alumnos en su aula dentro del barco. Contempla adicionalmente una grúa, con la que los estudiantes aprenderán a subir pallets reales con alimento para salmones.