Esta es la cuarta vez que se lleva a cabo este curso en alianza con el establecimiento educacional, en convenio con la OTEC Surterra.
Como en años anteriores, gracias a la alianza de Blumar con el Liceo María Behety de Punta Arenas, 23 estudiantes de la especialidad de Acuicultura realizaron un curso que les permitirá desempeñarse como operadores de robots submarinos, denominados Remote Operated Vehicle (ROV).
Las clases fueron tanto teóricas como prácticas, y tuvieron una duración de 50 horas, divididas en dos semanas. Esta es la cuarta vez que se lleva a cabo este curso en alianza con el establecimiento educacional, en convenio con la OTEC Surterra, cuyos módulos fueron financiados a través de franquicias tributarias del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence).
El subgerente de Producción de Blumar en Magallanes, Pablo Solís, afirmó que “es muy importante para nosotros darle continuidad, 1 año más, al curso de robótica. Este es el cuarto año que aportamos al desarrollo profesional de los jóvenes. Es un gran insumo que pueden utilizar cuando salgan del colegio, integrándose, ojalá, a nosotros en la industria salmonera”.
El instructor de Robótica Submarina de la OTEC Surterra, Robinson Cárdenas, comentó que “hubo bastante interés y apoyo, sobre todo de los profesores, quienes coordinaron los lugares de práctica, el material de apoyo, etcétera. Los estudiantes también estuvieron muy dispuestos y en sintonía con los contenidos del curso”.
Uno de los alumnos de Acuicultura que participó en el curso, Bastián Carvajal, valoró la instancia, ya que “más allá de la teoría, también se aprende mucho en la práctica. Es muy positivo poner a prueba nuestros conocimientos en el mar, y fue muy entretenido”.
Su compañera Génesis Godoy afirmó que el curso le entregó “una visión diferente a la de mi especialidad, y me ha enseñado más
aún de lo que muchas veces aprendemos en la sala de clases”.
Marcela Andrade, directora del Liceo María Behety, aseguró que la instancia “fue una tremenda oportunidad de aprendizaje para los estudiantes, más aún este año, cuando pudieron tener la experiencia in situ, no solo del manejo del robot, sino ingresar al mar por primera vez en su especialidad. Los estudiantes valoraron mucho este curso y la certificación que entrega”.
“Magallanes es clave en el futuro de la salmonicultura y tiene la capacidad para ser un polo de innovación y desarrollo en materia acuícola, por eso nos hemos propuesto tener estas instancias de formación que ya han beneficiado a 97 estudiantes en los últimos 4 años”, enfatizó Solis.