Iniciativa inédita y voluntaria es liderada por las empresas socias del gremio pesquero industrial e involucra a los departamentos de Medio Ambiente de las comunas donde operan las plantas de...
Iniciativa inédita y voluntaria es liderada por las empresas socias del gremio pesquero industrial e involucra a los departamentos de Medio Ambiente de las comunas donde operan las plantas de proceso, además de las Seremis de Salud y Medio ambiente. (Mundo Acuícola).
“Como gremio reiteramos nuestro compromiso con promover el desarrollo de un sector pesquero industrial sustentable, que apunte a los más altos estándares ambientales y la implementación de parámetros voluntarios que permitan el desarrollo armónico de los entornos donde trabajamos”. De esta manera la presidenta de la Asociación de Industriales Pesqueros (Asipes), Macarena Cepeda Godoy, presentó el documento “Buenas Prácticas Pesqueras para la Gestión de Olores”, protocolo que fue entregado al seremi de Medio Ambiente, Mario Delannays Araya y a profesionales del área de la Seremi de Salud y a los encargados ambientales de los municipios de Talcahuano, Coronel, y Lota, donde la industria posee operaciones.
Esta iniciativa es inédita en la industria a nivel nacional y va en línea con la Estrategia Normativa para la Gestión de Olores del Ministerio de Medioambiente. Este trabajo que Asipes comenzó en 2012 en conjunto con esta autoridad, busca aportar en impulsar un marco regulatorio en temas de emisiones de procesos industriales e incrementar el conocimiento en la materia donde la industria pesquera es uno de los cinco sectores priorizados de este plan.
Este documento contiene el trabajo realizado colaborativamente con las empresas socias Alimar, Blumar, Camanchaca, Landes y FoodCorp, además de Orizon y, en conjunto, con las secretarías regionales ministeriales de salud y medioambiente y de las municipalidades de las comunas donde opera la industria.
“Creemos que este trabajo público-privado marca un precedente relevante a la hora de establecer un marco normativo que regule las emisiones de olores de cualquier industria”, puntualizó la presidenta de Asipes agregando que las acciones propuestas en este plan ponen al sector pesquero industrial “a la vanguardia en una materia que aún se encuentra sin regulación y cuyo objetivo es mejorar nuestro desempeño ambiental y aumentar los estándares en control de olores para otros sectores productivos”.
Tal como detalló la representante del gremio, el trabajo que se definió para cumplir con las metas de este protocolo tiene que ver con incorporar buenas prácticas operacionales, mostrar estos avances ante los servicios públicos para un mejor conocimiento de sus procesos, impulsar una norma de olores en conjunto con el Ministerio de Medio Ambiente e implementar tecnologías para el sector de manera de cumplir con la futura regulación.
El seremi de Medio Ambiente, Mario Delannays Araya, valoró este plan de acción entregado por la industria pesquera expresando que “esta voluntad que manifiesta el sector productivo de la región del Biobío es fundamental, ya que este es el tipo de alianzas que nosotros buscamos implementar y poder ir reforzando con el resto de las actividades productivas que se realizan en la región”.
Respecto del protocolo entregado por Asipes, Delannays señaló que su importancia tiene que ver con “hacer un acercamiento para lograr un equilibrio desde el punto de vista de la sustentabilidad: quiere decir que la actividad económica se mantenga, pero con los estándares ambientales aplicando normativa que regule este sector”.
El programa
En 2012 la Asipes comenzó un trabajo activo con el Ministerio de Medio Ambiente para aportar en la Estrategia Normativa para la Gestión de Olores en Chile, en la que participaron representantes de diversos sectores productivos y económicos del país.
El año 2014 el Ministerio del Medio Ambiente promulgó una Estrategia para la Gestión de Olores en Chile para el periodo 2014-2017, de manera de iniciar acciones en materia de olores, teniendo como principales objetivos fortalecer el marco regulatorio e incrementar el conocimiento en la materia.
En enero de 2017 se dio a conocer la actualización de esta estrategia, en la que se definió realizar regulaciones por sector priorizando cinco procesos productivos, según número de instalaciones potencialmente generadoras de olor, número de denuncias y conflictos socio ambientales. El sector pesquero se encuentra dentro de estos cinco sectores priorizados.