Entre sus primeras actividades, se contó un encuentro con el intendente Carlos Geisse. En la reunión, abordaron estrategias de apoyo al sector pesquero artesanal y a los acuicultores de pequeña escala de la región, entre otras materias.
El Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura informó que 9 centros de la región activaron sus planes de contingencia por mortalidad masiva, debido principalmente a bajas de oxígeno y floraciones de algas nocivas (FAN).
Las Agrupaciones de Concesiones de Salmónidos (ACS) y empresas involucradas en estos eventos son: 21A, 23C, 25, 27, 28B, 32, 33.
En cuanto a las empresas que se encuentran afectadas son Cooke Aquaculture, Mowi, Aquachile, Yadran, Multiexport y Granja Marina Tornagaleones.
Sernapesca junto con la Autoridad Marítima se encuentra realizando fiscalizaciones en las ACS involucradas y realiza seguimiento permanentemente a la ejecución de las actividades comprometidas en los planes de acción, hasta la disposición final de las mortalidades. Además realizará la vigilancia de cada uno de los centros, mediante sistemas de monitoreo satelitales, remotos, cruce de información, manteniéndose alerta a los cambios ambientales que pudieran modificar la condición ambiental actual de las zonas afectadas.
“Hoy nuestra Directora Naciona(S), Jessica Fuentes, encabezó una reunión en la que participaron todas las empresas de cultivo de salmones y las autoridades competentes como son la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), la Autoridad Marítima, la Subsecretaria de Pesca y Acuicultura, el Instituto de Fomento Pesquero (IFOP), para realizar el seguimiento de las acciones implementadas por las empresas y reforzar las medidas preventiva, de vigilancia y control en las distintas áreas de las región de Los Lagos y Aysén. En este sentido, reitero que como Servicio mantendremos la vigilancia del manejo de mortalidad en los diferentes centros afectados,” concluyó Cristian Hudson, Director Regional de Sernapesca Aysén.
En cuanto a la biomasa afectada, el Director Regional informó que a la fecha se ha declarado un total de 1.600 toneladas de mortalidad de las cuales 1.042 han sido retiradas mediante el uso de pesqueros de alta mar y barcazas, las cuales fueron destinadas para su disposición final a plantas reductoras.