Fueron ocho meses de instrucción, clases, maniobras, operaciones médicas, navidad, año nuevo sin sus importantes familias y todas las exigencias en la rigurosa preparación para la vida naval (Mundo Acuícola)....
Fueron ocho meses de instrucción, clases, maniobras, operaciones médicas, navidad, año nuevo sin sus importantes familias y todas las exigencias en la rigurosa preparación para la vida naval (Mundo Acuícola).
Se cumplieron 30 años de la recalada que hiciera el Buque Escuela Esmeralda al puerto de Valparaíso, tras completar la vuelta al mundo en el trigésimo tercer crucero de instrucción.
El viaje que realizó varias hazañas náuticas, récords de velocidad y navegación, zarpó el 3 de julio de 1988 y arribó el 26 de febrero de 1989 al mismo puerto de Valparaíso, convirtiéndose para la comunidad internacional en una proeza solo comparable a conquistar el Everest en el lejano Tibet.
El track de navegación consideró Punta Arenas, Puerto Williams, el cruce a vela, en ambos sentidos del temido Cabo de Hornos, con fuertes ráfagas de viento que alcanzaba los 60 nudos, navegación por el atlántico, los rugientes 40° Sur (“the Roaring Forties”), cruce del meridiano de Greenwich, Cabo de Buena Esperanza, Sudáfrica, Kenya, Cruce de la línea del Ecuador, Singapur, Estrecho de Malaca, Indonesia, Océano índico, cruce de la línea del cambio de hora, histórica isla de Guam (USA) en pleno océano Pacífico, mar de la China, Islas de Maui, Pearl Harbour en archipiélago de Hawaii (USA), navegación de norte a sur por la Polinesia, Tahití Francia, Pitcairn Island Reino Unido, Isla de Pascua, Isla Juan Fernández y arribo a Valparaíso.
El comandante de la Esmeralda, Capitán de Navío Sr Hugo Bruna Green y el entonces Capitán Alexander Tavra Checura como segundo comandante, que alcanzaron el grado de Almirante, realizaron la comisión y travesía de 239 días a cargo de la dotación de 326 chilenos e invitados extranjeros
Fueron ocho meses de instrucción, clases, maniobras, operaciones médicas, navidad, año nuevo sin sus importantes familias y todas las exigencias en la rigurosa preparación para la vida naval y para aquellos que hoy sirven dentro y fuera del país como abogados, ingenieros, meteorólogos, profesores, académicos, escritores, vecinos destacados y, los que todavía en servicio activo, como el actual Comandante en Jefe de la Primera Zona Naval, así como el Comandante en Jefe de la Quinta Zona Naval, el primer oficial no anglo parlante en la historia al mando de RIMPAC, reconocido como el ejercicio naval más grande del mundo, también el jefe de Meteorología de la Armada, el anterior Jefe también integró la dotación, distinguidos almirantes, comodoros y sub oficiales mayores, exitosos en sus carreras y que registrarán sus anécdotas y experiencias en el libro que se publicará en el mes de mayo próximo.
El Almirante Bruna fue condecorado por su acto de valentía anterior en Bahía Decepción y como Cape Hornier, lo que muestra el alto nivel de la instrucción y el sentido de liderazgo para los grumetes, guardiamarinas y la gran dotación que vivió la experiencia.
Sin duda el BE Esmeralda ha navegado alrededor del mundo para recalar en la historia de Chile, con un grupo de buenos hombres, liderado por grandes profesionales cuyo objeto seguirá siendo “servir a la patria” en cada área que les corresponda participar
(foto gentileza Carlos Carvajal, primera foto tomada en Cabo de Hornos de un Tall Ship)