La genómica y la inteligencia artificial impulsan la sostenibilidad y eficiencia de la acuicultura en Chile.
Con la genómica y la inteligencia artificial como aliados, la acuicultura está experimentando una transformación sin precedentes gracias a los avances en genética y biotecnología. Este cambio no solo busca aumentar la producción, sino también mejorar la calidad y sostenibilidad de los productos acuáticos.
Los avances en genética han revolucionado la forma en que se cultivan y manejan las poblaciones de salmón, donde el desarrollo de cepas resistentes a enfermedades permite reducir la necesidad de antibióticos y tratamientos químicos, lo que beneficia tanto a los ecosistemas acuáticos como a la salud del consumidor. Además, estos avances no solo mejoran la eficiencia y la producción, sino que también aseguran que la acuicultura chilena continúe siendo competitiva en el mercado global, donde la genética desempeña un papel crucial en el futuro de la industria en Chile, que está cada vez mejor equipada para enfrentar desafíos como el cambio climático, las enfermedades y la sostenibilidad.
Actualmente, la industria del salmón enfrenta retos significativos en un contexto de creciente demanda y preocupaciones medioambientales. La necesidad de prácticas sostenibles se ha vuelto imperativa, y aquí es donde la colaboración entre académicos y representantes de la industria se convierte en un factor crucial. Al unir el conocimiento científico con la experiencia práctica, ambos sectores pueden abordar cuestiones complejas, como la resistencia a enfermedades y la eficiencia en el uso de recursos, a través de innovaciones genéticas. Esta sinergia no solo promete mejorar la productividad, sino que también tiene el potencial de mitigar el impacto ambiental, promoviendo un equilibrio entre la economía y la sostenibilidad.
Al respecto, la Dra. Katharina Correa, José Manuel Yañez y Robert Deerenberg, nos comentan los principales avances y desafíos que presenta la genómica en Chile.
Genómica como pilar fundamental
José Manuel Yañez, reconocido experto en biotecnología y genética de organismos acuáticos, se ha desempeñado en el Departamento de Medicina Preventiva Animal de la Facultad de Ciencias y Veterinarias y Pecuarias de la U. de Chile (Favet). El académico ha dedicado a la labor investigativa al área acuícola, especialmente en genética y genómica, con el fin de generar nuevos conocimientos en la materia.
Respecto a cómo la genómica se ha consolidado como un área crucial para la mejora genética en acuicultura, José Manuel Yañez, explica que «se viven momentos muy interesantes en el área de la genética y genómica en acuicultura». Esta disciplina permite acelerar el desarrollo de productos genéticos que no solo mejoran la velocidad de crecimiento, sino que también incrementan la resistencia a enfermedades y la calidad del producto final. «La generación de productos genéticos de alta calidad es esencial para mantener nuestra competitividad en el mercado global»
Inteligencia Artificial y mejoramiento genético
La intersección de la genética, la inteligencia artificial y la biología molecular está abriendo nuevas oportunidades en la acuicultura chilena. A medida que la industria se adapta a los cambios ambientales y tecnológicos, la implementación de estas innovaciones será clave para mantener la competitividad y sostenibilidad.
“La incorporación de la inteligencia artificial en la acuicultura está revolucionando el análisis de datos. Esta tecnología permite un análisis más preciso y eficiente de los datos genómicos y fenotípicos”. También, Yañez menciona el concepto de «fenómica», que implica la recopilación masiva y automatizada de datos y mediciones de los peces, explicando que «esto nos permite obtener mejores precisiones al momento de seleccionar los animales, lo que se traduce en un incremento de la tasa de ganancia genética por generación”.
Además, el académico destaca que, “la biología molecular está aportando herramientas poderosas para la mejora genética en acuicultura. Las técnicas de edición genética están disponibles para modificar características en especies acuáticas, lo que podría cambiar radicalmente la producción de proteína animal”.
«No solo se trata de mejorar características deseables, sino de crear variedades que se adapten mejor a un entorno en constante cambio. En la Universidad de Chile, a través de su Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias, buscamos liderar discusiones sobre la legislación necesaria para que la industria no se quede atrás en estos avances. «Para ello, es crucial que trabajemos juntos, incluyendo a las autoridades, para que nuestras normativas reflejen la realidad científica y las oportunidades que se presentan, para generar un marco que impulse la innovación en este sector”, enfatiza el académico.
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