La Dra. Zenahir Siso, de la UCSC, destaca la importancia de la didáctica en la formación del profesorado de ciencias y su vínculo con la investigación educativa.
La Dra. Zenahir Siso es académica de la Facultad de Educación de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), donde se desempeña como Jefa de Carrera de Pedagogía en Educación Media en Biología y Ciencias Naturales. Además, es investigadora del Centro de Investigación en Biodiversidad y Ambientes Sustentables (CIBAS).
Sobre su línea de investigación, trabaja en la formación inicial y continua del profesorado de ciencias y además, en el ámbito de la didáctica de las Ciencias Naturales y Experimentales. “Trabajamos en cómo los profesores plantean sus hipótesis didácticas dentro de la práctica de aula. Trabajo desde la formación epistemológica del profesorado, desde la filosofía de la ciencia, historia de la ciencia, sociología de la ciencia como metaciencias, discutiendo también lo científico y tecnológico y el conocimiento de la ciencia”, comentó.
Lo anterior es fundamental para posicionar y reflexionar acerca de sus concepciones sobre ciencia, socialmente instaladas, y que siguen legitimándose con una enseñanza acrítica y tradicional.
Además, aporta en estrategias metodológicas, como por ejemplo la indagación científica y cuestiones sociocientíficas. “Se trata de formar al profesorado para que lleve esto al aula, de una forma crítica y reflexiva, teóricamente fundamentada, y que pueda reflexionar sobre los resultados de estas formas de enseñar, que son diferentes a la exposición y entrega de contenidos”, complementó.
La didáctica, si bien desde una concepción ingenua es vista como un asunto superficialmente metodológico, asociado sólo al cómo enseñar, hoy es considerada una ciencia de diseño con muchas y variadas líneas de investigación que superan a dicha visión en la cual es clave la transmisión de información. Por una parte, es una didáctica específica (de las Ciencias Naturales y Experimentales) que propone trabajar conocimientos científicos en el aula, orientados a la alfabetización científica multidimensional, y estos conocimientos son conceptuales, procedimentales (habilidades) y actitudinales. “La transmisión-recepción se queda insuficiente en este ámbito. Fomentar una enseñanza distinta es importante, donde la didáctica de la ciencia en los últimos años ha dado muchas luces. Fomentar procesos de modelización, de indagación científica, de análisis y resolución de cuestiones sociocientíficas es clave, ya sea como enfoques de enseñanza o como método, paso a paso”, explicó la académica.
Aportes desde la didáctica de las ciencias
Cuando se habla de didáctica de las ciencias, un aspecto importante se refiere a la promoción de habilidades cognitivo-lingüísticas, o habilidades de investigación-indagación como por ejemplo: argumentar, analizar, explicar, procesar información, formular hipótesis, elaborar conclusiones, justificar; y todo esto, desde el punto de vista científico. “La pedagogía se encarga de la educabilidad mientras que la didáctica se refiere a la enseñabilidad, es por eso que existen didácticas específicas, como la de las ciencias, las que guardan directa relación con el objeto de enseñanza”, definió la académica.
Dentro de su trabajo con el CIBAS, la Dra. Siso aceptó el desafío ya que existe bastante trabajo que hacer en la educación de la ciencia, desde contextos de enseñanza no formal como la divulgación, y en contextos formales que permiten procesos de enseñanza en los establecimientos. “En la formación de profesores están involucrados los colegas que nos prestan servicios de otras facultades, por tanto, desde la didáctica de las ciencias investigamos cómo mejorar los aprendizajes científicos, entendidos no como la memorización de conceptos, sino como calidad de los argumentos, de las explicaciones, de las preguntas investigables que formulan, las concepciones moderadas acerca del conocimiento científico y tecnológico de los estudiantes. Además, pudiéramos hacer eso a nivel local en la universidad y fuera de ella”, explicó.
En paralelo, otra idea podría ser insertar en ramos disciplinares como Fisiología, Anatomía o Química Orgánica, por mencionar algunos, toda la componente de la formación epistemológica, de ver la historia y filosofía de la ciencia, además de incorporar la tecnología, para trabajar aspectos epistémicos y no epistémicos orientados a fomentar concepciones de ciencia más adecuadas, que incidan en la forma de ver, pensar y desarrollar la enseñabilidad del profesorado que se está formando.
Desde este escenario es que se pueden realizar propuestas de proyectos. En concreto, la Dra. Zenahir Siso se unirá a un proyecto de la Dra. Maribet Gamboa, para trabajar esta área. “Ella nos invitó a participar de un proyecto que trata de realizar algunas charlas, y capacitaciones a profesores y desde ahí trataremos de aportar en la línea de educación. Se trata de docentes, de profesores y estudiantes, además de titulados. Son muchas las posibilidades para apoyar la educación formal”, finalizó.
El desafío de la línea de investigación de la Dra. Siso es aportar hacia la formación de las personas en el ámbito de la educación formal y contextos no formales, ahora con el apoyo de CIBAS.