La única planta reductora en la Patagonia obtuvo un positivo resultado, en línea con el trabajo que viene realizando en material social y ambiental, al obtener el sello ASC (Aquaculture...
La única planta reductora en la Patagonia obtuvo un positivo resultado, en línea con el trabajo que viene realizando en material social y ambiental, al obtener el sello ASC (Aquaculture Stewardship Council) el recién pasado mes de enero sin observación alguna.
En este proceso, su planta de Porvenir, ubicada en la región de Magallanes, se somete a la auditoria que realiza periódicamente el Consejo de Gestión Responsable de la Acuicultura, ASC en español, cuyo fin tiene certificar el cumplimiento de la cadena de custodia para la compra, el procesamiento y la venta de productos por parte de la compañía, y que ratifica el compromiso que ésta posee con la sostenibilidad del sector acuícola – pesquero.
“Renovar la certificación ASC es la ratificación del compromiso con una producción que minimiza los impactos ambientales y sociales. Operar con una planta reductora en la XII Región -cerca de las empresas salmoneras de la zona- permite impulsar la economía circular acotando los desplazamientos entre regiones, lo que disminuye la huella de carbono asociada a este nuevo proceso. Esta certificación garantiza la calidad de nuestros productos y también potencia nuestros esfuerzos por ser una empresa sostenible y consciente con el entorno”, afirmó la gerente de Sostenibilidad y Comunicaciones de la compañía, Kharla Caniupán.
Altos estándares
El sello ASC recibido por Fiordo Austral, recientemente, se suma a una serie de certificaciones que ha recibido la compañía durante el último año. Destacan, por ejemplo, el sello ECOCERT, que asegura la utilización de productos orgánicos fabricados por su filial Aminochem en cultivos agrícolas; y Marine Trust, que garantiza el abastecimiento responsable en la producción de ingredientes marinos.
Otras plantas Fiordo Austral que se han certificado bajo el sello ASC: Calbuco y Chacabuco.