El trabajo que ha llevado al jurel ha convertirse en una de las especies más sostenibles que existen, fue el eje central del webinar “El jurel como recurso renovable”, que tuvo como objetivo presentar el “Manual de buenas prácticas en la pesca del jurel”.
Documento fue presentado en webinar organizado por Orizon. En la actividad Sernapesca destacó la contribución de este recurso al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.
El trabajo que ha llevado al jurel ha convertirse en una de las especies más sostenibles que existen, fue el eje central del webinar “El jurel como recurso renovable”, que tuvo como objetivo presentar el “Manual de buenas prácticas en la pesca del jurel”. Este libro, elaborado por el Instituto de Investigación Pesquera (Inpesca) junto a Orizon y otras empresas socias, busca contribuir al desarrollo de una política de manejo responsable de este espécimen en nuestro país.
La actividad fue organizada por Orizon y en ella participaron Inpesca, Sernapesca, la Seremi de Economía del Biobío y la MSC, organismo internacional e independiente de certificación. En ella se analizó el proceso de recuperación del jurel impulsado por el trabajo colaborativo del mundo público y privado desde 2012, lo que lo ha llevado a ser hoy un recurso con una biomasa altamente saludable y una proyección positiva y sostenible, lo que permite catalogarlo como recurso renovable. Precisamente el manual busca que esta condición se mantenga.
Alicia Gallardo, directora nacional de Sernapesca, destacó el importante rol del jurel en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por la ONU. “Con el jurel contribuimos a disminuir la brecha de seguridad alimentaria que está siendo exacerbada por la pandemia. También vemos con mucha alegría que la alianza entre lo público y la norma y las normas adicionales, contribuyen aún más en la sustentabilidad con el objetivo de cuidar el fondo marino y nuestros océanos. Vemos en el caso del jurel avances significativos en comparación con otras espacies”, explicó. En esa misma línea, Mauricio Gutiérrez, Seremi de Economía del Biobío, destacó la relevancia de la pesca para la reactivación económica y lo central que es la sostenibilidad en ese camino.
El manual contempla minimizar efectos no deseados en las capturas de jurel, como son la pesca de peces inmaduros o juveniles, así como la fauna incidental. Además, contempla procedimientos de cuidado, tratamiento y devolución de especies consideradas como protegidas en el ecosistema. “El manual representa para la industria pesquera una oportunidad en la sistematización de buenas prácticas implementadas a nivel internacional por organismos que están preocupados por la conservación de especies vulnerables que poseen un rol importante en el ecosistema marino”, destacó Aquiles Sepúlveda, director de Inpesca.
En tanto, el subgerente de flota de Orizón, Antonio Caman, destacó “el interés y el nivel de participación que manifestaron capitanes como jefes de flota en la elaboración de este manual, expresado en reuniones de trabajo y talleres, lo que permitió un análisis de las recomendaciones y su aplicabilidad en la actividad pesquera”.
Además, el Manual de Buenas Prácticas se enmarca en la certificación del jurel bajo el estándar del Marine Stewardship Council (MSC), que establece que es una pesquería sustentable y responsable con el medio ambiente. Para Rodrigo Polanco, representante del estamento internacional en Chile que participó en el encuentro virtual, “este logro convierte al jurel en la pesquería certificada más grande de Latinoamérica”.